El informe técnico final del Ministerio de Defensa sobre las causas del accidente de helicóptero ocurrido el 19 de junio de 2008 en Bosnia i Herzegovina que acabó con la vida de dos militares españoles y otros dos alemanes concluye que el siniestro pudo deberse a un fallo en el motor izquierdo, aunque admite que no se ha encontrado una «causa raíz» a la que atribuir «con certeza absoluta» el siniestro.
Las conclusiones del informe, elaborado por la Comisión para la Investigación Técnica de Accidentes de Aeronaves Militares (CITAAM) del Departamento que dirige Carme Chacón, han sido presentadas este miércoles en rueda de prensa por el secretario general de la Asociación Unificada de Militares Españoles (AUME), Mariano Casado, un día después de que el documento fuera «ratificado» por el mismo organismo.
El documento explica que el «viraje» que hizo el aparato hacia un claro en el bosque, junto a la «probable asimetría de potencia», son «indicios de alguna anomalía», como la «pérdida de compresor en el motor izquierdo», que llevó al piloto a intentar un aterrizaje de emergencia.
A la luz de los datos aportados por la CITAAM, Casado ha instado al Ministerio de Defensa a que explique «qué decisiones ha tomado» una vez concluido el informe y ha exigido que aclare si los medios en la zona de operaciones para el mantenimiento del helicóptero siniestrado eran los adecuados, teniendo en cuenta que «no era una aeronave nueva».
De hecho, el portavoz de AUME ha criticado que el aparato, un helicóptero de ataque Bolkow BO-105, era «muy antiguo», ya que estaba en activo desde 1983 y en el momento del accidente había «muy pocos» operativos en las Fuerzas Armadas.
Además, resalta que, tal y como se incorpora en el informe de la CITAAM, esta aeronave tuvo hasta 18 incidentes desde 1996, «la mayoría por fallos relacionados con el motor». En definitiva, AUME cree que hay que preguntarse si fue acertado mandar este aparato a la misión internacional.
«Medios que ponen en riesgo la vida de los militares»
«Es importante que se conozcan las condiciones en que muchas veces están trabajando los militares, con medios muy antiguos que funcionan de mala manera, con dificultades que ponen en riesgo la vida de los militares que los utilizan», ha afirmado Casado.
Asimismo, la asociación también ha afeado al Ministerio su «falta de sensibilidad» porque «a día de hoy» no ha trasladado a las familias de los dos fallecidos –el teniente Santiago Hormigos y el sargento Joaquín López– el contenido del informe final.
A juicio de Casado, en general la atención a los heridos y familiares de fallecidos y heridos en acto de servicio no es la adecuada. En su opinión, España tiene «mayor capacidad de atender a la gente a la que en otros foros se llama héroes».
En relación con el accidente, también ha criticado que todavía queden algunas incógnitas por resolver, como la misión que se encontraban realizando los militares en el momento del accidente, algo que ha «indignado» a las familias de las víctimas.