El Instituto Robert Koch, el organismo público responsable del control y la prevención de enfermedades en Alemania, ha declarado este martes el fin del brote de la bacteria ‘E. coli’, que ha causado la muerte de más de 50 personas, y ha señalado que en las tres últimas semanas no se han detectado nuevos casos.
Más de 4.400 personas resultaron infectadas por la bacteria en Europa y Norteamérica a raíz de dos brotes, uno más importante que se centró en el norte de Alemania y otro menor localizado en torno a la ciudad de Burdeos, en el suroeste de Francia.
Estos brotes llevaron a Rusia a prohibir la importación de frutas y verduras frescas procedentes de la Unión Europea e hicieron que los consumidores europeos redujesen su consumo de productos frescos. Se cree que la bacteria se extendió a partir de unas semillas de alholva egipcias.
«El mayor brote de ‘E. coli’ en Alemania ya ha acabado», ha anunciado el presidente del Instituto Robert Koch, Reinhard Burger. Este organismo ha dicho que ha cerrado el centro de operaciones encargado de la observación del brote pero que continuará vigilando la situación con más intensidad si el germen patógeno resurge.