El jefe de lista de Plataforma per Catalunya (PxC) en Salt (Girona), Carles Bonet, y la número 3, Joana Martínez, han abandonado este martes el partido por «razones éticas de conciencia y moral», aunque se quedarán en el grupo mixto sin estar adscritos a ningún otro partido, ha explicado el hasta ahora portavoz en el consistorio tras presentar su renuncia formal en el Consitorio.
Martínez anunció la pasada semana su intención de denunciar al partido y su máximo dirigente, Josep Anglada, por daños y perjuicios tras obligarla a dimitir tras exigirle los papeles de su novio de Camerún para comprobar si residía legalmente en España. Bonet, con novio dominicano, dejó el partido porque exige demasiada radicalidad con la inmigración.
Tanto Bonet como Martínez han negado ofertas por parte de otros partidos del grupo municipal, y han argumentado que se quedan en el grupo mixto para continuar su misión de trabajar para el municipio y evitar la entrada de dos concejales que, según dicen, son «muy radicales».
Bonet, oriundo de Salt y de 41 años, ha explicado que inicialmente el discurso de PxC le enganchó y le convenció: «Principalmente entramos porque nos parecía que lo que decían no era ninguna mentira, sus propuestas estaban bien y se quería trabajar por la convivencia y ayudar a todas las personas autóctonas que se encuentran discriminadas».
Ahora el partido se quedará con un concejal, de los tres que ostentaba, después de que en las últimas elecciones municipales la formación estuviera a punto de lograr un cuarto edil.
El hasta ahora concejal y portavoz de Plataforma per Catalunya (PxC) en Salt anunció esta decisión el sábado porque se encuentra «decepcionado con los dirigentes del partido y no comparte sus ideales».
Redacción