La Policía Nacional ha suspendido la búsqueda en el río Guadalquivir de los dos hermanos que desaparecieron este pasado sábado cuando, según ha denunciado el padre de los pequeños, se extraviaron mientras jugaban en el parque Cruz Conde de la capital cordobesa, según confirman fuentes de la investigación.
De esta manera, efectivos del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) del Cuerpo Nacional de Policía rastrearon este martes en una zodiac el río Guadalquivir entre la capital cordobesa y la barriada periférica de Alcolea en busca de pistas sin que haya indicios del paradero de los dos menores, de seis años (la niña) y dos años (el niño).
En el operativo de búsqueda en el río participaron tanto un helicóptero como perros adiestrados en la búsqueda de personas. Así, en el mismo se contó con agentes de Policía Científica de Sevilla y dirigido por el comisario de Policía Judicial de Sevilla, Manuel Piedrabuena, que participó en la investigación del caso de Marta del Castillo.
La Policía Nacional mantiene, a todos los niveles, el operativo montado para la búsqueda y localización de los dos hermanos, al tiempo que en el marco de la investigación abierta, en la que toman parte efectivos de la Policía Científica llegados desde Sevilla, se barajan todas las hipótesis posibles y no se descarta ninguna.
De hecho, fuentes cercanas al caso ya dijeron que la Policía Científica ha efectuado un registro en la vivienda y en la parcela anexa ubicada en Las Quemadas Altas, que es propiedad de los abuelos paternos de los menores y donde reside el padre de éstos.
La Policía Nacional ha interrogado desde el domingo a varias personas en el parque Cruz Conde de Córdoba, donde, según el padre de los menores, desparecieron sus hijos el sábado. Según han informado fuentes de la investigación, los testimonios recabados no confirman esta versión y aseguran no haber visto a esta persona aquel día.
Según han indicado estas mismas fuentes, los testimonios de las personas que estuvieron en el parque el mismo sábado aseguran no haber visto al padre de los niños y en algunos casos han llegado a advertir de que les habría llamado la atención una persona que acaba de perder a dos niños menores ya que lo habitual es mostrar nerviosismo o preguntar a los presentes. Nada de eso ocurrió según los testigos consultados por los agentes de Policía entre el domingo y el lunes.
El padre denunció la desaparición
Fue el padre de los niños quien realizó una llamada en torno a las 18,40 horas de este sábado para alertar de que sus hijos habían desaparecido mientras jugaban en el mencionado parque de la capital cordobesa. Posteriormente, presentó la denuncia formal en la comisaría, donde este lunes estuvo prestando declaración, al igual que otros familiares de los menores, incluida la madre, que está recibiendo asistencia psicológica desde la Plataforma Cordobesa Contra la Violencia a la Mujer.
Los menores habían acudido con su padre este fin de semana a Córdoba capital, aunque residen en Huelva. Según han explicado fuentes de la familia materna, los padres están actualmente en «trámites de separación».
Fue este viernes cuando, siempre según apuntan las mismas fuentes, el padre se desplazó con sus hijos a Córdoba, ciudad en la que habitan los abuelos paternos y tíos por parte del padre de los pequeños.
Así, estas fuentes han señalado que la familia materna fue alertada de la desaparición de los niños «por una llamada de la Policía Nacional de Córdoba», tras lo cual la madre se personó en la Comisaría Provincial de Huelva y, durante la madrugada del domingo, se desplazó junto con otros miembros de la familia a la capital cordobesa, donde han organizado grupos de búsqueda.
La madre denuncia al progenitor por malos tratos psicológicos
Además, la madre de los dos hermanos que supuestamente han desaparecido ha presentado durante la madrugada del domingo ante la Policía Nacional de Huelva una denuncia contra el progenitor de los pequeños por presuntos malos tratos psíquicos.
Según han confirmado a Europa Press fuentes de la Subdelegación del Gobierno, la denuncia fue interpuesta en la madrugada del domingo, pero se refería a «motivos estrictamente matrimoniales porque a los niños ni los nombró».
Redacción