El movimiento 15M ha anunciado este martes que finalmente el Hotel Madrid alojará a personas afectadas por procesos de desahucio, al tiempo que han abogado por extender masivamente el fenómeno de las ‘okupaciones’.
Además del realojo de desahuciados, quieren crear en el Hotel Madrid un centro de información jurídica y práctica para futuras ‘okupaciones’ y desarrollar espacios «donde se aprenda de manera no autoritaria ni jerarquizada, libre de cualquier dogma o voluntad sectaria y al margen de la razón utilitarista».
En un comunicado lanzado en la web de la Acampada Sol, los ‘indignados’ han mostrado «todo su apoyo» a las últimas ‘okupaciones’ de edificios en Madrid y Barcelona como «herramienta de liberación política», al tiempo que han destacado el «intenso trabajo de negación de la propiedad y de construcción de espacios liberados que allí se está haciendo».
Además, consideran que estas ‘okupaciones’ sólo tendrán «un potencial transformador real» si se realizan al margen de la iniciativa privada del Estado, por lo que aspiran a que se excluya de los edificios ‘okupados’ cualquier pretensión de rentabilidad económica o estatal.
El movimiento 15M apuesta por que estas ‘okupaciones’ supongan un «salto cualitativo» dentro de este fenómeno y de la filosofía llevada hasta ahora por el colectivo ‘okupa’, «un proyecto de mayor calado en el que la colectividad entera ‘okupe’ y gestione espacios, pero también ofrezca otras herramientas de lucha a su gente».
«Creemos que la idea de realojar a personas desahuciadas, tal y como se hace ya en Nou Barris y se llevará a cabo en el Hotel Madrid, es un buen comienzo en tanto que permite a la colectividad empoderarse y arrogarse la capacidad de gestionar en común el problema de la vivienda dentro de nuestra sociedad, y a la vez plantear un enfrentamiento directo a entidades bancarias y agencias inmobiliarias que especulan y se lucran con la necesidad básica de una vivienda», han argumentado.
Además, el colectivo 15M aboga por que los edificios ‘okupados’ no se conviertan, como hasta ahora, en centros sociales «ni lugares alternativos de esparcimiento», sino que deben erigirse «en centros autogestionados en los que desarrollar unas experiencias libres y políticamente conscientes, que hagan de la ‘okupación’ un punto de partida para la autogestión generalizada de la vida».
Los ‘indignados’ piden extender las ‘okupaciones’ a zonas rurales, tierras, huertos, aldeas y pueblos abandonados, plazas, parques, solares, descampados urbanos y otros sectores de la vida política, social y económica del país: fábricas, empresas, centros de trabajo, escuelas, universidades, entre otras.
Estrella Digital/Europa Press