El lehendakari, Patxi López, ha afirmado que, tras el cese de la actividad de ETA, se abre una «nueva oportunidad para unir las fuerzas en la misma dirección» y ha realizado un llamamiento a la «responsabilidad y a ser conscientes del nuevo tiempo» en el que «tenemos que aprender a convivir de forma democrática, abandonando para siempre el miedo, superando el pasado y los planteamientos políticos totalitarios».
López ha realizado estas declaraciones en el acto institucional con motivo del ‘Día de Euskadi’, que este año celebra por primera vez la Comunidad Autónoma vasca, en el que ha entregado la Cruz del Árbol de Gernika, máxima distinción del Gobierno vasco, al ex lehendakari Carlos Garaikoetxea.
En su intervención, el lehendakari ha defendido que el 25 de octubre es un día para «poner en valor la convivencia, el autogobierno y el pacto entre vascos que ha hecho posible la Euskadi que tenemos hoy» y ha afirmado que «la derrota del terrorismo es también la victoria de nuestro autogobierno», ya que este autogobierno supone el «punto de encuentro de la inmensa mayoría de la ciudadanía». «Podemos decir que ETA se va, pero que se quedan las instituciones de autogobierno que el Estatuto ha alumbrado», ha indicado.
Por ello, ha afirmado que se abre una «nueva oportunidad para unir las fuerzas en la misma dirección» y ha realizado un llamamiento a la «responsabilidad» y a ser conscientes del nuevo tiempo en el que «tenemos que aprender a convivir de forma democrática, abandonando para siempre el miedo, superando el pasado y los planteamientos políticos totalitarios» porque «la libertad también se aprende».
Asimismo, ha subrayado que la celebración del Día de Euskadi debe ser «símbolo de unidad» porque «hay muchas más cosas que nos unen que las que nos separan» y ha apostado por considerar esta jornada como «el día de la igualdad en el que todas las personas manifiestan su reconocimiento al otro». «Hasta ahora hemos trabajado con una mano atada a la espalda por la violencia terrorista; hoy somos totalmente dueños de nuestro futuro», ha indicado.
Un recuerdo a las víctimas por no aplicar la venganza
Por otro lado, ha recordado a las víctimas para subrayar que ETA ha sido derrotada porque «no ha conseguido doblegar la voluntad de la ciudadanía vasca, no ha logrado imponer sus postulados políticos totalitarios, y sobre todo, no ha hecho que el resto perdamos la humanidad». Ha destacado que se ha derrotado al terrorismo, pero «se ha pagado un alto precio por ello».
López ha insistido en que la derrota de ETA ha sido posible porque «hemos sabido defender la democracia, porque no hemos permitido que el desistimiento les abriera las puertas a la intolerancia» y ha recordado a las víctimas que «no se resignaron» y en concreto, «a las familias de las víctimas que, con tesón, han mantenido la dignidad sin caer en la venganza».
También ha tenido palabras para el ex lehendakari Garaikoetxea de quien ha dicho fue un presidente «de los tiempos de plomo» al que le tocó «el desarrollo primero del nuevo autogobierno, dnado el gran impulso a la Euskadi que conocermos hoy».
Finalmente, ha recordado al cooperante vasco secuestrado en África para trasladar a su familia y a todos los cooperantes la solidaridad del Ejecutivo y ha subrayado que están haciendo «todo lo que está en sus manos para su pronta liberación».
PSE, PP, PNV y EA, juntos en el acto
Al acto han acudido el ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui (PSE); la presidenta del Parlamento vasco, Arantza Quiroga (PP); el delegado del Gobierno central en el País vasco, Mikel Cabieces (PSE); el diputado general de Alava, Javier de Andrés; la presidenta de las Juntas de Bizkaia, Ana madariaga (PNV); el diputado socialista por Alava Txiki Benegas; el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti; el diputado del PP por Álava, Alfonso Alonso, entre otros.
Por parte de EA, una delegación formada por Peio Urizar, Rafa Larreina, Juanjo Agirrezabala, han acompañado a Garaikoetxea galardonado con la Cruz del Árbol de gernika. Por parte del PNV, los parlamentarios Mikel Martínez e Iñigo Iturrate y el ex lehendakari Jose Antonio Ardanza,
En su intervención, Carlos Garaikoetxea, ha recordado a quienes trabajaron con «increible» dedicación en los primeros gobiernos de Euskadi y ha afirmado que «entonces se eligió el camino político que había que elegir para afrontar los enormes retos y urgencias que este país planteaba en los ordenes políticos, social, económico», ya que «había que apuntalar y rehabilitar el edificio del país, aunque no fue muy bien entendido por quienes elegían otros derroteros».
Para Garaikoetxea, el camino iniciado hace tres décadas se ha tornado «angosto» y ha apostado por «ensancharlo hasta los límites que marque la libertad democrática de nuestro pueblo» para que esté «abierta a toda opción política, con igualdad de oportunidades para su efectiva materialización».
Asimismo, ha insistido en que tanto para él como para sus compañeros de ideales», el nuevo camino «solo será transitable si por encima de todo impera el respeto al diferente, la dignidad de la persona y los derechos humanos en toda circunstancia, y el fin defintivo de toda violencia que felizmente parece hacerse ya relidad que debería animarnos a corear de nuevo, aquel célebre ‘Nunca Más».