El lehendakari, Patxi López, ha manifestado que tras la desaparición de la «nube negra» del terrorismo aún queda por afrontar la «dura» tarea de construir la «convivencia» en una Euskadi plural.
López ha presidido este sábado en Vitoria un acto organizado por diversas asociaciones regionales de otras comunidades autónomas con motivo del ‘Día de Euskadi’, que se celebró el pasado día 25 en conmemoración del Estatuto de Autonomía de Gernika.
El presidente del Gobierno autonómico ha expresado su «satisfacción» por el cese definitivo de las «acciones armadas» de ETA. «Por fin se ha ido la nube negra; por fin hemos conseguido acabar con el terrorismo», ha manifestado.
El lehendakari ha destacado que ésta ha sido «una victoria» de la democracia y el autogobierno, por lo que «ETA se va», mientras que las instituciones democráticas «se quedan». A su juicio, en estos momentos queda por delante «abrir un tiempo de convivencia en el que nadie se vea amenazado por sus ideas».
En la misma línea, ha afirmado que aún es necesario afrontar la «dura» tarea de construir la «convivencia» en el País Vasco. Para ello, ha subrayado que hay que trabajar «todos juntos» y no «unos contra otros».
En referencia a los ciudadanos procedentes de otras comunidades autónomas que se desplazaron a Euskadi buscando «un futuro mejor», ha asegurado que son «la mejor prueba de la diversidad de la sociedad vasca». Además, ha lamentado que en ocasiones hayan tenido que soportar a quienes les miraban «como extranjeros», sin «entender que la sociedad es algo vivo» y cambiante.
«¿Qué habría sido de la industria metalúrgica sin vosotros? ¿Qué habría sido de este país sin vuestro trabajo», se ha preguntado, dirigiéndose a los asistentes al encuentro convocado por las casas regionales.
López ha manifestado que «en este nuevo tiempo» todos los ciudadanos, con independencia de su procedencia, son «imprescindibles».