El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, ha asegurado que «a día de hoy» no se plantea postularse a la Secretaría General del PSOE, pero ha añadido que está «muy pendiente», para «tomar una posición», de «cómo se plantea el partido su propio debate y cómo vincula proyectos, soluciones a los problemas de España con la referencia de liderazgo».
En declaraciones a RNE recogidas por Europa Press, ha asegurado que a día de hoy su «único planteamiento es propiciar un debate intenso que tenga que ver también con los perfiles de los candidatos». Frente a los que insisten en el debate de ideas, el alcalde ha llamado a no engañarse y ha reconocido que para los militantes no es fácil «hablar de proyectos o de ideas sin saber qué referencias de liderazgo tienen».
Así, ha calificado de «llamativo» que, cuando falta poco más de un mes para el 38 Congreso en el que el PSOE elegirá a su nueva dirección, esté todo «bastante indeterminado», además en un momento que tal vez sea el «mas difícil» de los últimos 25 años en los que él ha sido militante. A su juicio, esto puede deberse en parte a que el PSOE está todavía en plena «convalecencia del resultado electoral» y de las «contradicciones» a las que le ha «llevado la crisis económica».
García-Page no ve un ambiente de crispación en su partido, pero admite que «puede terminar pasando porque en los partidos políticos cuando se trata del poder puede haber discusiones y debates».
A su juicio, el actual proceso precongresual no tiene nada que ver con el de 2000, donde ganó «la sorpresa» José Luis Rodríguez Zapatero, frente al candidato al que todo el mundo daba por ganador, José Bono, entre otras cosas porque nadie se ha postulado aún.
Espera que no haya cierres en falso
En todo caso, ha recordado que de aquel Congreso el PSOE salió con «sensación de unanimidad o de unidad», que son «elementos frágiles» en los partidos políticos, entre otras cosas porque todo el mundo, empezando por Bono, «se puso a la orden» de Zapatero. Recordando esa ocasión, ha confiado en que en el próximo Congreso no haya tampoco «cierres en falso».
Sobre los dos candidatos más probables, Alfredo Pérez Rubalcaba y Carme Chacón, ha subrayado que ambos son «veteranos» en el proyecto socialista y ambos «pueden encarnar perfectamente una solución» a los próximos años del PSOE.
No obstante, ha remarcado que lo que necesita saber de ambos no es «lo que piensan hoy» sino «cómo piensan encarar la reconciliación con el electorado». «Hasta para criticar lo que ha pasado este año nos podemos poner de acuerdo, pero lo verdaderamente importante es saber cuál es el mensaje de fondo que necesitamos para ‘enganchar’ con los ciudadanos», ha advertido.
Según García-Page, para Chacón ser militante del PSC no es «ni un hándicap ni un mérito especial», y ha recordado que la exministra forma parte de la Ejecutiva Federal del PSOE. A su juicio, la pertenencia de Chacón al ‘partido hermano’ del PSOE en Cataluña no debería ser objetivo de polémica.
En primer lugar, ha recordado que el protocolo de colaboración entre el PSC y el PSOE otorga a los militantes del primero «plenitud de derechos» como militantes del segundo; y además, porque en su opinión no se puede concebir un «proyecto nacional» sin reconocer la diversidad de España y «lo que aporta Cataluña».
Estrella Digital/EP