Una mujer apareció este domingo muerta en su vivienda del barrio de Santa Eugenia de Girona, presuntamente asesinada por su marido, quien se suicidó tras cometer el crimen. Según los vecinos, la pareja, de origen ucraniano, tenía peleas a menudo, sin embargo la mujer nunca interpuso una denuncia por malos tratos. De confirmarse los hechos, significaría el primer caso de violencia de género del estrenado 2012, mientras que el 2011 cierra con 60 mujeres asesinadas por otros tantos hombres.
Los Mossos d’Esquadra encontraron muertos en la noche del domingo a un hombre y a una mujer ucranianos en una vivienda de la calle Montseny, en el barrio de Santa Eugenia de Girona. Se trataban de los cuerpos de Natalya P., de 54 años y su marido, Oleksandre P., de 53 años.
Los agentes se dirigieron al lugar de los hechos después de recibir una llamada de un familiar a través del teléfono de emergencias 112 alertando de lo sucedido. Tras encontrar los dos cadáveres, la policía ha abierto una investigación para determinar si el hombre mató a la mujer y después se suicidó, lo que supondría el primer caso de violencia de género de 2012, según explicaron fuentes policiales.
Hacia un caso de violencia machista ha apuntado también el consejero del Interior de la Generalitat, Felip Puig, que este lunes en rueda de prensa explicó que la mujer fallecida presentaba un fuerte golpe en la cabeza, y el hombre la marca de un corte de cuchillo en el cuello. «Parece que el hombre se ha cortado las venas después de darle un golpe en la cabeza a la mujer», señaló.
Asimismo, el consejero catalán ha precisado que los Mossos d’Esquadra disponen de la información de la hija de la pareja fallecida, quien halló los dos cuerpos en la vivienda, a donde acudió después de que no contestaran a sus llamadas de teléfono.
Los hijos de la pareja alertaron de los hechos a la Policía
En este sentido, algunos vecinos del inmueble aseguraron que los hijos alertaron de los hechos a los agentes policiales. Uno de ellos, Antonio B., ha explicado a Europa Press Televisión que los hijos llamaron al teléfono móvil y al fijo de sus padres, pero «nadie les contestó», por lo que decidieron alertar a la policía.
Otro de los vecinos, Manuel M., se ha mostrado sorprendido por los hechos porque «nunca se les oyó ninguna discusión ni ninguna pelea». Por su parte, Dolores F., ha indicado que no se enteró «de nada» porque no se oyó ningún ruido, y ha añadido que se dio cuenta de lo sucedido solo cuando los agentes fueron a su casa a preguntar por lo ocurrido.
Al mismo tiempo, otra vecina, Gueiry, se ha mostrado extrañada porque en el momento en el que presuntamente se produjo el crimen, tanto ella como su familia estaban «despiertos», pero ninguno de ellos se dio cuenta de lo que estaba sucediendo.
Según los vecinos de la pareja, en el entorno familiar se producían peleas a menudo, a pesar de que la policía no tiene constancia de ninguna denuncia por violencia de género por parte de la mujer, tal y como indican fuentes policiales.
Aunque los primeros indicios de los Mossos d’Esquadra apuntan a que el hombre mató a la mujer antes de quitarse la vida, el área territorial de investigación de Girona se ha hecho cargo del caso para aclarar «las circunstancias exactas» de la muerte de la pareja, según han informado en un comunicado.
Violencia machista
El año 2012 podría haber comenzado con un nuevo asesinato machista, si finalmente se confirma el hallazgo de la pareja ucraniana fallecida y la policía aclara si él la mató a ella y después se suicidó. Mientras, el balance de 2011 cierra con un total de 60 mujeres asesinadas por hombres con quienes mantenían o habían mantenido una relación sentimental, trece menos que los datos oficiales.
Desde el año 2003, cuando comenzaron a recogerse estadísticas, han muerto así 605 mujeres, de las cuales, hasta la fecha, solo una media del 30 por ciento habían presentado denuncia por malos tratos. Así lo reveló en 2011 un estudio del Observatorio de Violencia Doméstica y de Género, organismo que además concluyó que casi todos los asesinos de mujeres acaban en prisión cumpliendo de media 18 años de cárcel.
En 2011 se dio a conocer también que el 1,4 por ciento de la población española aún justifica la violencia de género en determinadas circunstancias, que para el 80 por ciento de los jóvenes lo razonable es que ellas satisfagan los deseos de sus novios y que ocho de cada diez ciudadanos ven «demasiados detalles» en las informaciones periodísticas sobre este asunto.
La otra gran estadística que reveló algo más sobre la violencia de género en España ha sido una macroencuesta elaborada por el CIS. A pesar de que solo se ha difundido un avance de resultados, pone el foco en la situación de los hijos pequeños de las mujeres maltratadas: más de medio millón de menores han sido agredidos este año y 840.000 están expuestos a la violencia contra sus madres.
Condena de los hechos
Ante los hechos acaecidos en Girona, la presidenta del Instituto Catalán de las Mujeres (ICD), Montse Gatell, ha condenado «enérgicamente» la muerte de la mujer, así como ha expresado su pésame a la familia en un comunicado.
A la vez ha destacado «la importancia de la prevención y la sensibilización» para luchar contra la violencia machista y ha animado a las mujeres que se encuentren en esta situación a llamar al teléfono gratuito de atención 900 900 120 o dirigirse a los servicios municipales y comarcales de información.
Quien también se ha pronunciado este lunes sobre el hallazgo de los cadáveres de la pareja ucraniana ha sido la ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, que ha apuntado que, con los primeros datos disponibles, «apunta a violencia de género», ya que «parece ser que ha sido asesinada también por su pareja».
Mato se ha expresado así en la toma de posesión de altos cargos de su departamento y ante el nombramiento de Blanca Hernández como nueva delegada del gobierno contra la Violencia de Género, un área que, según ha dicho, es «lo primero» para ella.
«Necesitamos estar muy unidos al margen de ideologías. Ésta es una cuestión en la que estamos todos de acuerdo. Es una cuestión de eficacia y de trabajo, no de ideologías», ha insistido, con el fin de erradicar esta lacra.
Redacción