El diputado de la Asamblea de Madrid de Izquierda Unida, Miguel Reneses, ha renunciado a su cargo como secretario de organización de la coalición a nivel federal, tras ser imputado como presunto autor de un delito de acoso sexual.
Reneses ha anunciado la «suspensión» cautelar y temporal de sus funciones, al tiempo que ha explicado que se trata de una «decisión personal» que ha tomado anteponiendo el interés colectivo de la organización al suyo propio.
En su intervención ante la Presidencia Ejecutiva Federal de IU, máximo órgano de Gobierno de la coalición, Reneses ha asegurado que es «plenamente inocente» y se ha presentado como víctima de una «cacería política y personal» de grupos internos «con intereses espurios» que no sólo pretende hacerle daño a él sino al conjunto de la organización.
El diputado autonómico se ha puesto a disposición del partido para dar las explicaciones y aportar los datos necesarios para demostrar su inocencia, una tarea a la que ha dicho que dedicará «el tiempo suficiente».
El coordinador federal, Cayo Lara, ha manifestado el respaldo de la dirección a Reneses en la defensa de su inocencia ante lo que este último ha calificado como «calumnias» y ha deseado que la Justicia actúe con «agilidad, eficacia y celeridad» para que este tema no se enquiste en la opinión pública antes de ser juzgado.
Asimismo, ha deseado que el diputado autonómico pueda demostrar su inocencia y retomar sus funciones como secretario general, tras haber tomado una decisión que Lara ha calificado de «valiente».
La Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha imputado al diputado de la Asamblea de Madrid por Izquierda Unida y secretario de Organización del partido, Miguel Reneses, como presunto autor de un delito de acoso sexual y le impone una fianza de 100.000 euros.
El magistrado del TSJM observa «indicios razonables» de presunto acoso sexual por parte de Reneses a raíz de la denuncia presentada por J.C.P., compañera de partido y concejala del Ayuntamiento de Fuenlabrada desde 1995 a 1999, años en los que el demandado ejerció como edil de la misma Corporación.
Reneses ha insistido en que las «calumnias» que se denuncian se remontan a una década atrás. Además, ha agradecido las muestras de solidaridad del conjunto de la organización y de la «gran mayoría de la dirección», así como de su entorno político y personal y de su familia.
El eurodiputado de Izquierda Unida, Willy Meyer, ha asegurado en declaraciones a la prensa creer «firmemente» en la inocencia de Reneses y ha asegurado que la decisión que ha tomado «es un gesto que le honra» y que «es un privilegio para la organización tener personas como él, capaces de reaccionar ante una situación tan grave».
Meyer ha explicado además que no se ha planteado la posibilidad de que el diputado autonómico renuncie a su escaño ni el tema de su sucesión como secretario de organización, sobre lo que «tendrá que decidir el coordinador federal».
Redacción