José Bretón, el padre de los dos niños desaparecidos hace casi cuatro meses en Córdoba, se ha autolesionado de forma «leve» al cortarse en el antebrazo y en el hombro con una cuchilla de afeitar a primera hora de la mañana en su celda de la cárcel de Alcolea (Córdoba).
Según han informado a Europa Press fuentes de Instituciones Penitenciarias, los hechos habrían tenido lugar antes del recuento de la mañana, en torno a las siete o siete y cuarto, y ha sido el interno de apoyo con el que comparte celda quien ha avisado a los funcionarios, que le han trasladado a la enfermería de la cárcel.
Bretón se ha hecho «cortes leves», por los que ha recibido cuatro puntos de sutura. En la enfermería del centro penitenciario se ha considerado que no era necesario trasladarle a un centro hospitalario y ha permanecido en observación en la misma.
La prisión ha abierto una investigación para esclarecer cómo el interno ha podido quedarse con la cuchilla de afeitar, según las mismas fuentes, que han explicado que al padre de los niños desaparecidos seguía aplicándosele el protocolo de prevención de suicidos –de ahí que tuviera un interno de apoyo– aunque se le habían «flexibilizado» algunas de las medidas del mismo.
«Una llamada de atención»
Esther Chaves, la portavoz de la familia materna de los menores desparecidos ha considerado este lunes «una llamada de atención» el hecho de que José Bretón, el padre de los menores, se haya autolesionado de forma «leve» al cortarse en el antebrazo y en el hombro con una cuchilla de afeitar a primera hora de la mañana en su celda de la cárcel cordobesa de Alcolea.
Chaves ha manifestado que Bretón «antes de autolesionarse tiene que decir dónde están los niños y que después haga lo que quiera», indicando además que «lo importante» es que diga el paradero de los pequeños «y no que se autolesione».
En este sentido, ha señalado que es su abogado, José María Sánchez de Puerta, «el que tiene que explicar por qué su cliente ha hecho eso», después de que el letrado pidiera que se le rebajara el protocolo de prevención de suicidos.
Esther Chaves ha insistido en calificar este episodio como «una llamada de atención», indicando además que la atención de la familia está «volcada en saber dónde están los niños».
Por otro lado, según han informado a Europa Press fuentes de Instituciones Penitenciarias, los hechos habrían tenido lugar antes del recuento de la mañana, en torno a las siete o siete y cuarto, y ha sido el interno de apoyo con el que comparte celda quien ha avisado a los funcionarios, que le han trasladado a la enfermería de la cárcel.
Bretón se ha hecho «cortes leves», por los que ha recibido cuatro puntos de sutura. En la enfermería del centro penitenciario se ha considerado que no era necesario trasladarle a un centro hospitalario y ha permanecido en observación en la misma.
La prisión ha abierto una investigación para esclarecer cómo el interno ha podido quedarse con la cuchilla de afeitar, según las mismas fuentes, que han explicado que al padre de los niños desaparecidos seguía aplicándosele el protocolo de prevención de suicidos — de ahí que tuviera un interno de apoyo — aunque se le habían «flexibilizado» algunas de las medidas del mismo.