El abogado del exdiputado del PP Pablo Cobián, imputado en la ‘Operación Campeón’, Ulises Bértolo, ha justificado que el patrocinio de carreras de karts en las que participó uno de sus hijos «es previo a toda» relación con el empresario Jorge Dorribo y «no es consecuencia de nada».
En declaraciones a Europa Press, Bértolo ha manifestado que se deben poner «temporalmente en su sitio» los acontecimientos recogidos en el sumario, abierto parcialmente el lunes por el Juzgado de Instrucción Número 3 de Lugo, y ha reconocido que «pagos los hubo» pero, ha aclarado, «no por contraprestaciones políticas, sino por un patrocinio deportivo».
En su declaración judicial el consejero de Proitec Carlos Monjero, también imputado en la ‘Operación Campeón’, había dicho en octubre pasado que el empresario farmacéutico y socio suyo Jorge Dorribo subvencionó carreras de karts de un hijo del exdiputado del PP en Galicia Pablo Cobián a cambio de que éste le proporcionara contactos y favores en la actual Xunta.
Sin embargo, el abogado de Cobián ha aclarado que «el patrocinio deportivo es anterior a cualquier tipo de relación entre Dorribo y Cobián». Además, ha explicado que ese patrocinio «no lo paga» el empresario lucense «ni sus empresas», sino un «consorcio» de compañías. «Está programado y presupuestado antes que cualquier relación Dorribo-Cobián», ha apostillado.
En esta línea, Ulises Bértolo ha comentado que se trató de un patrocinio de un evento de «empresas que pagan porque hay detrás deportistas laureados para promocionar sus marcas». «Todos los pagos tienen que ver con una carrera deportiva», ha justificado para añadir que han planteado «pruebas de refuerzo».
«Gente especialista»
Al respecto, el abogado del exdiputado popular ha hecho hincapié en que en ese patrocinio participó «gente especialista» que fue la «que programó las carreras».
Por ello, ha avanzado que se le ha ofrecido a la jueza de Lugo que se encarga de la causa que «coja la contabilidad de todo el entorno de la familia Cobián» para ver «todo el patrimonio» de sus familiares.
Por otra parte, el letrado también ha explicado que «sí ha hecho gestiones» Cobián para el empresario «pero no para una contraprestación económica», sino «porque Dorribo tenía proyectos que se consideraban de interés general».
«Cobián se preocupaba de saber cómo está la tramitación de esos expedientes, presuponiendo que se van a resolver dentro de la legalidad», ha aseverado, para recordar que el exdiputado «no tenía competencias» dentro de la Administración «para resolver nada», por lo que ha considerado que únicamente puede parecer «muy pesado» por «estar llamando».
Con todo, Ulises Bértolo ha ratificado que, tras el análisis de miles de folios, mantiene la intención de pedir el sobreseimiento de la causa contra Cobián, pero ha matizado que los plazos «dependerán del estudio» del sumario y del desarrollo de la causa porque «se siguen practicando pruebas». Según concluye, «no existen indicios» para «individualizar una culpa incriminatoria» contra el exdiputado del PP.
El Supremo interroga a un empresario que afirma haber visto a Blanco y Dorribo juntos
El magistrado del Tribunal Supremo José Ramón Soriano interrogará este miércoles en calidad de imputado al consejero de Proitec Carlos Monjero, socio de Jorge Dorribo, que es el empresario farmacéutico que ha implicado al ex ministro José Blanco en la denominada «Operación Campeón», que investiga una presunta trama de obtención fraudulenta de ayudas públicas.
Monjero ya ha prestado declaración en varias ocasiones ante la juez de Lugo Estella San José, que investiga la trama, y ante la que reconoció el pasado 17 de octubre que él estaba, junto a otros empresarios, en la comida celebrada en Lugo a la que llegaron Dorribo y Blanco en el mismo coche, procedentes de la gasolinera de Guitiriz, lo que a todos les «sorprendió».
Según la denuncia que prestó ante la juez San José, para poder subir a ese coche y hablar con el entonces ministro de Fomento Dorribo tuvo que pagar 200.000 euros que entregó dentro de un sobre en mano al primo político del ex ministro en una gasolinera de Guitiriz (Lugo).
Monjero también reconoció ante la juez lucense que el empresario farmacéutico subvencionó carreras de karts de un hijo del exdiputado del PP en Galicia Pablo Cobián a cambio de que éste le proporcionara contactos y favores en la actual Xunta, que llegaron incluso a favorecer la celebración de un encuentro con el presidente, Alberto Núñez Feijóo.
Concretamente, Monjero manifestó en sede judicial que a lo largo de 2010 y 2011 Dorribo «utilizó a Pablo (Cobián) para muchas cosas, lo tenía enganchado».
En palabras de este imputado, en un principio Dorribo se jactaba de haber concretado el patrocinio al hijo del diputado popular a cambio de una subvención del Igape, y que Cobián se dio cuenta que «si no seguía el camino que le marcaba Jorge (Dorribo) su hijo no corría».
Así, facilitó igualmente contactos entre Dorribo y el director general del Instituto Galego de Promoción Económica (Igape), Joaquín Varela de Limia Cominges.
Tras el pago de 13.000 euros para el equipo de Karts del hijo de Cobián, según Monjero, «empezaron todas las aprobaciones» y los empresarios firmaron un préstamo BEI de 3 millones de euros, con una primera disposición de 1,7 millones, según las manifestaciones de Monjero ante la juez de Lugo.
Otros contacto que obtuvo Dorribo a través de Cobián fue con el presidente de Puertos de Galicia, con el fin de interceder por si amigo el también empresario Manuel Osorio. Según este testigo, se les ofreció un negocio importante del mantenimiento de bateas en Villagarcía, pero tampoco se llegó a hacer «porque pasó todo ésto», en alusión al momento en el que estalló el caso.