lunes, noviembre 25, 2024
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El PSOE cree que el Gobierno «necesita ayuda» y está dispuesto a dársela

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Las cuatro décimas que separan el 0,4% de límite de déficit que se pactó a finales del verano pasado del 0,0% que aparece en la recién aprobada Ley de Estabildad son mucho más que cuatro décimas. Son «ideología», ha señalado Elena Valenciano, vicesecretaria general del PSOE. Ideología porque en ellas se refleja un margen que da posibilidad de actuar para «mantener lo público».

La mayoría abosoluta que dieron los ciudadanos el 20N al centro derecha, no es una mayoría para «desmantelar» el Estado de Bienestar y ahí radica la diferencia, -entiende Valenciano-, entre el PP y el PSOE. «Ese margen nos permite crecer». Crecer a través de planes elaborados por Gobierno y crecer en Servicios Sociales financiados con los impuestos de los contribuyentes. Por eso, Elena Valenciano insiste en que es un «error» no dejar un margen mínimo en la Ley de Estabilidad Presupuestaria para que la economía pueda «respirar y crecer».»Defender ese margen es defender el modelo social y la persopectiva de futuro de España».

Este jueves el Congreso aprobaba la norma. El PP no necesitaba ayuda para sacarla adelante, pero se aseguró el voto a favor de Ciu y la abstención de PNV. A pesar de que a última hora de la tarde PP y PSOE se reunieron para intentar logar un acuerdo in extremis, al final, los socialsitas votaron en contra.

Este nuevo capítulo, distancia más aún del entendimiento con el Gobierno al principal grupo de la oposición. El PSOE critica que Rajoy ha roto el consenso político, social e institucional. Cree que necesita «ayuda» porque «está equivocándose mucho». En esta tesitura, los socialistas se ofrecen a ser un «agente» para fortalecer la confianza en España. Y es que, Valenciano considera que se está pintando una situación «muy negra» sobre la economía española y ve como responsable al Ejecutivo. «Todos somos culpables menos Rajoy y los defraudadores», ironizaba Valenciano.

Aguirre piensa como en el «barrio de Salamanca»

La vicesecretaria general del PSOE también ha pedido la dimisión de Esperanza Aguirre. El martes, tras reunirse con Rajoy, Aguirre se mostró a favor de que las CCAA devolvieran las competencias en Sanidad, Educación y Justicia al Estado. Este viernes, el número dos de la presidenta ha matizado sus palabras y las ha corregido: «Sólo era un ejemplo», ha dicho González. Pero el daño ya estaba hecho.

Aguirre volvió a cuestionar el Estado de las Autonomías y esto ha dado pie a que socialistas como Tomás Gómez o Elena Valenciano digan que si no cree en las regiones, que dimita de su puesto de presidenta de la Comunidad de Madrid.

«¿Alguien cree que es mejor tener un gran edificio en Madrid para gestionar la sanidad de Mérida o de Sevilla?», se pregunta Valenciano, quien ha sido clara al señalara que Aguirre es del pensamiento «al que yo llamo del barrio de Salamanca». «Cree que nos hemos pasado en los derechos de los trabajadores, de las mujeres…Aguirre está muy equivodada».

Reunión entre Rajoy y Rubalcaba

Por último, sobre la reunión que mantuvieron Rubalcaba y Rajoy antes de las Elecciones de Asturias y Andalucía, Valenciano ha asegurado que el encuentro fue «de carácter privado y breve». En él no se trataron temas «sustanciales» y ambos quedaron en que volverían a verse. De momento, no ha trascendido nada más. Lo que está claro es que, si el presidente del Gobierno no hubiera dicho esta semana que se ha visto más de una vez con el secretario general del PSOE, nunca habríamos sabido que tal reunión existió. Está por ver si en el futuro se celebrarán más encuentros de este tipo, teniendo en cuenta que las dos partes no entendieron por igual el concepto de «carácter privado.

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