La vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, tilda de «crueles» y «muy poco inteligentes» las palabras del responsable de Sanidad del PP, Juan Ignacio Echániz, en la cadena Cope, que ha comparado los ocho euros que los pensionistas tendrán que pagar al mes por los medicamentos con «cuatro cafés». «La medicina para un enfermo no se parece nada a un café o un traje», ha aclarado la socialista en rueda de prensa en Ferraz, y ha espetado al ‘popular’ que tenga en cuenta que «la gente está seriamente preocupada con lo que está escuchando». «Los pensionistas tendrán que pagar sus medicinas cuando, en la situación actual, algunos están soportando la economía doméstica, haciéndose cargo de sus hijos y nietos», ha rematado.
Valenciano cree que las últimas decisiones adoptadas por el Ejecutivo de Mariano Rajoy -en referencia al último recorte de 10.000 millones en Educación y Sanidad- son de «máxima gravedad» social, política e institucional. Según la ‘número dos’ de Rubalcaba, los ajustes acometidos por el Gobierno ‘popular’ atacan a millones de ciudadanos, puesto que con ellos, Rajoy no les está pidiendo «austeridad», sino «prescindir de lo imprescindible», no respetan el consenso social que «se construyó hace más de 30 años» e ignoran a las comunidades autónomas. «Están tomando decisiones para las que no han recibido permiso», ha criticado Valenciano.
Ahora bien, el PSOE lo tiene claro: «Como Rajoy siga en esta línea acabará destruyendo el Estado de Bienestar». Y por este motivo, desde la oposición reclaman diálogo. «Todos estos recortes no se pueden hacer sin consultar con nadie», ha reiterado en numerosas ocasiones Valenciano. Un diálogo que, según la socialista, no debería de producirse a posteriori -tal y como ha anunciado este jueves Carlos Floriano-, sino que hace tiempo que Rajoy se debería de haber reunido con los sindicatos, los educadores, el sector sanitario, el resto de partidos e «incluso entre ellos mismos», ha ironizado -en clara alusión a los últimos problemas de comunicación que están habiendo entre los distintos miembros del Gobierno, así como también entre el Ejecutivo y el partido que lo sustenta-.
Por todo ello, los socialistas exigen «debate social». Valenciano cree que el momento perfecto hubiera sido durante la campaña electoral, pero tal y como ella misma ha aclarado, este debate se lo hurtaron, puesto que el Partido Popular «negó que iba a hacer todo lo que está haciendo». «Algo tan grave (recortar 10.000 millones en Educación y Sanidad) no se puede hacer sin debate social y enviando un fax desde La Moncloa», ha criticado la socialista, que ha aprovechado esta intervención para anunciar que ellos sí que van a dialogar con todos aquellos colectivos a los que les están afectando directamente los recortes. Unos recortes que el PSOE considera «socialmente destructivos», «económicamente perniciosos» y que están convencidos de que acabarán con la «equidad» del país.