El PP calcula que entre 100 y 200 presos de ETA podrían acogerse al Plan de Reinserción de presos propuesto por el Ministerio del Interior. Un plan que, afirman, tiene como objetivo «debilitar de manera definitiva» a la banda terrorista ETA a través de sus presos.
Las fuentes consultadas explican que un buen número de internos de la banda terrorista ETA están «quemados» en las cárceles y por ello calculan que entre 100 y 200 podrían acabar apuntándose a la vía abierta por el Departamento que dirige Jorge Fernández Díaz.
«Tenemos que facilitar que los que están dispuestos a romper con la banda lo hagan», señalan fuentes ‘populares’, que admiten que con esta iniciativa persiguen además dar una «batalla política» en el País Vasco para desbaratar los argumentos que han permitido a la izquierda abertzale tener hasta ahora con un gran apoyo social.
Las citadas fuentes recalcan que el plan de reinserción puesto en marcha por el Ministerio trata de «debilitar de manera definitiva» a ETA a través de sus presos. El objetivo del Ejecutivo, explican, es «romper el frente de los presos» para que se desvinculen de la banda terrorista.
Por ello, y vista la reacción que se ha producido entre las víctimas tras conocer el citado plan, en las filas del PP admiten que antes de haber presentado esta propuesta de reinserción deberían haber contado con las víctimas.
Así, fuentes ‘populares’ subrayan que este Plan necesitaba «cierta cocina» tanto con las víctimas como con los medios de comunicación, para dejar claro que el Gobierno del PP no hace «seguidismo» de la política del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero y que la llamada ‘vía Nanclares’ «se acabó».
Las vícitimas, presentes
No obstante, el Gobierno y el PP pretenden contrarrestar el mensaje de que el «inmovilismo» es del PP, del que se ha aprovechado la izquierda abertzale. Por ello, quieren transmitir a la sociedad vasca que el Ejecutivo de Mariano Rajoy no tiene «ningún problema en hablar de acercamiento y reinserción» de presos.
Eso sí, en las filas del PP subrayan que «no es verdad» que para el acercamiento de presos no haya que pedir perdón, ya que, según sostienen, en el plan de reinserción mantienen «el nivel de exigencia» que marca la ley y cumplen los «compromisos» que tenían con las víctimas.
Ante la polémica abierta por el citado plan, las mismas fuentes recuerdan que el ahora eurodiputado Jaime Mayor Oreja acercó hasta 140 presos cuando ocupaba la cartera de Interior con el Gobierno de José María Aznar, sin que se produjera ninguna desvinculación de la banda. Igualmente, recuerdan que el PSOE ha acercado a cuantos presos etarras ha querido sin dar «ninguna explicación».