¿Está a favor o en contra de la monarquía como forma de Estado hoy en España?
En su primera etapa, bajo un ambiente de miedo generalizado a un nuevo intento de golpe de Estado, la monarquía aportó un equilibrio necesario hacia la democracia. Sin embargo, en la situación actual, esa estabilidad ha degenerado en el inmovilismo de los sistemas totalitarios y debería ser una persona escogida por los ciudadanos quien, por respeto al pueblo y la igualdad, ejerciera de árbitro de todos los poderes públicos.
¿Qué opinión le merecen los últimos escándalos que han afectado a la monarquía?
Que se regale a una familia el mando supremo con carácter vitalicio y hereditario es un privilegio, pero conlleva una gran responsabilidad. Los miembros de la Casa Real deben tener un carácter ejemplarizante en el desarrollo de sus funciones. Los turbios negocios de Iñaki Urdangarin y las controvertidas cacerías del rey Juan Carlos I son una decepción más para un pueblo que no les ha escogido, además de dañar de modo irreversible la imagen de un país del que ellos son embajadores a nivel internacional.
¿Estaría a favor de que el Rey abdicase en Don Felipe de Borbón?
Su retirada progresiva de la primera línea para ir cediendo protagonismo al príncipe Felipe antes de llegar al trono estaba marcada por etapas muy meditadas pero, lo que parecía un camino discreto y silencioso, se ha visto salpicado por los últimos escándalos. Antes de la abdicación del Rey creo que se precipitaría el relevo tutelado del Príncipe, pero parece que el Rey no se ha cansado del poder y el Príncipe no tiene prisa por llegar al trono, así que cuando pasen los días de ruido todo seguirá igual.
Samuel Jiménez