La organización juvenil Segi, ilegalizada por actuar como la cantera de la banda terrorista ETA, ha anunciado su disolución después de varios años sufriendo un intenso acoso policial con numerosas detenciones. Segi históricamente ha sido la parte del entramado etarra sobre la que recaía la responsabilidad de llevar a cabo las acciones de ‘kale borroka’.
Así lo han anunciado por medio de un comunicado en euskera difundido por los diarios Gara y Berria. Especialmente en los últimos años la cantera de los terroristas se ha visto sometida a un fuerte acoso policial con decenas de arrestos de sus integrantes.
La operación más importante tuvo lugar en el mes de noviembre de 2009 en una macro-operación desarrollada por la Policía y a Guardia Civil en el País Vasco y Navarra que se saldó con una treintena de detenciones. Si bien no tan numerosas, posteriormente las Fuerzas de Seguridad han desarrollado otras operaciones similares tanto en España como en Francia contra este entramado.
Esta actuación de las Fuerzas de Seguridad llevaron a la práctica desaparición de las acciones de ‘kale borroka’ en el País Vasco y tras las escasas acciones que se han producido desde la izquierda abertzale se han limitado a asegurar que se situaban fuera de las estrategia actual del brazo político de ETA.
El anuncio de la disolución de Segi se une a la desintegración el mes de octubre de 2011 de Ekin, considerada como los guardianes de la ortodoxia etarra dentro de todas las estructuras del entorno de la banda terrorista.