La consejera vasca de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia, ha reconocido que cuatro ertzainas asistieron en 2008 a un curso formativo en el que uno de los instructores fue el ultraderechista Emilio Hellín, condenado a 43 años de prisión por el asesinato de Yolanda González en 1980.
Beltrán de Heredia, en respuesta a una pregunta de EH Bildu durante el pleno de control que celebra este viernes el Parlamento vasco, ha explicado que en 2008, cuatro agentes de la sección de Nuevas Tecnologías de la Policía Científica de la Ertzaintza asistieron a un curso en Madrid impartido por la empresa New Tecnology.
El curso, tal y como ha señalado, estaba dedicado a la obtención y análisis de datos almacenados en dispositivos de telefonía móvil. La consejera ha explicado que «tras mucho indagar», el Departamento de Seguridad ha comprobado que uno de los instructores del curso era una persona que figuraba con la identidad de Luis Enrique Hellin.
Beltrán de Heredia ha destacado que no ha sido hasta este momento cuando han comprobado que dicha persona es en realidad Emilio Hellín, antiguo militante de Fuerza Nueva condenado a 43 años de cárcel por el secuestro y asesinato de Yolanda Álvarez.
Ante la críticas de EH Bildu, ha asegurado que el Gobierno vasco nunca ha tenido relación contractual alguna ni con la empresa New Tecnologies ni con Hellín. Además, ha destacado que la Ertzaintza no se dedica a hacer «fichas policiales» de los instructores de los cursos a los que asisten sus agentes. De todas formas, ha expresado su solidaridad con la familia de González y ha compartido «cualquier objeción ética que pueda haber a este tipo de situaciones».
El parlamentario de EH Bildu Julen Arzuaga ha denunciado que «un asesino ultraderechista» haya participado en la formación de ertzainas y de miembros de otros cuerpos de seguridad del Estado.
Por ese motivo, ha asegurado «no entender» por qué razón el Departamento de Seguridad no inicia una investigación interna sobre lo ocurrido. El parlamentario de EH Bildu ha denunciado la «falta de sensibilidad» del Gobierno vasco ante el dolor que este hecho ha causado en la familia de González.