Uno de los coordinadores de vigilantes de Seguriber en la noche de la tragedia del Madrid Arena, Juan José París, ha asegurado este viernes durante su declaración judicial que la empresa redujo esa noche el número de vigilantes para «abaratar costes», al pasar de 46 a 38 efectivos, y ha manifestado que incluso él vio ese día que el número de efectivos desplegados eran «insuficientes» para la magnitud de la fiesta.
Así lo ha manifestado París en el transcurso de su declaración ante el juez y las partes, que se ha prolongado durante unas cinco horas. Tras el interrogatorio, el magistrado Eduardo López Palop le ha impuso la obligación de comparecer ante el juzgado dos veces al mes.
Al concluir la declaración, los abogados han señalado a los periodistas el contenido de lo manifestando y han criticado que el imputado haya cambiado en varias ocasiones sus declaraciones iniciales en las que reconoció ante la Policía que llegó a ver la avalancha a través de las cámaras de vigilancia.
Respecto a su declaración, los letrados han reseñado la confirmación de que esa noche se redujeron efectivos para «abaratar costes». En esta línea, el abogado Ábdon Núñez, que defiende a la familia de Belén Langdon, ha especificado que el Plan de Vigilancia establecía dos vigilantes por cada puerta de emergencias cuando solo hubo uno, según la manifestación de París.
Además, el jefe de Seguriber ha recalcado que no había ningún policía municipal ubicado en los puntos habituales en los que solía haber en otros eventos similares como en la Puerta del Ángel o en el acceso principal. De hecho, ha apuntado que en otras fiestas parecidas la Policía requisaba botellas e incluso llegaba a