El jefe del Ejecutivo gallego, Alberto Núñez Feijóo, ha admitido este jueves que la Xunta no sólo aportó subvenciones y ayudas a empresas de Marcial Dorado, sino que también se formalizaron «contratos» con distintos gobiernos autonómicos y ha reconocido que, en su etapa de gestión -entre 2009 y 2012-, la Administración autonómica pagó «facturas» por al menos 5.000 euros con firmas vinculadas con el narcotraficante.
En cualquier caso, tras el Consejo de la Xunta, el presidente ha señalado que «la mayor ayuda pública» que recibieron empresas de Dorado asciende a 125.000 euros y se corresponde con fondos solidarios «por daños producidos en instalaciones de sus empresas» otorgados en la época del bipartito de PSdeG y BNG, que gobernó entre 2005 y 2009. Frente a ello, ha defendido que el actual Ejecutivo «no dio ayudas», sino que pagó 5.000 euros «por una contraprestación de servicios» relativos, ha concretado, a la compra de efectos navales, «entre otras cuestiones».
Pese a la insistencia de los periodistas para que concretase la cuantía a la que ascienden las ayudas formalizadas en la etapa del Gobierno de Manuel Fraga, el presidente ha eludido hacerlo y ha insistido en que, una vez que concluya «el peinado» de documentación y el análisis «año a año», remitirá a la Cámara «todos» los datos que solicite la oposición. Eso sí, se ha reafirmado en que la cantidad es «menor» que en la época del bipartito y ha añadido que él directamente no firmó ningún contrato con empresas de Dorado.
«Sin tacha legal»
Reacio a protagonizar «otra comparecencia» en el Consejo de la Xunta, ha insistido en que las fotos publicadas por ‘El País’ en las que aparece en un yate con Dorado «son de hace 20 años» y ha insistido en la «hipocresía» de la oposición por sus «imputaciones» al criticarle por relacionarse con éste cuando no había sido condenado, pese a que PSdeG y BNG le dieron «ayudas» a sus firmas «cuando ya estaba en la cárcel».
«Sin poner tacha de legalidad» sobre estas subvenciones -que cifró en al menos 125.000 euros-, el presidente sí ha incidido de forma reiterada en la «hipocresía» de los grupos de la oposición. «Ayer (en la Cámara gallega) se vieron con claridad las entrañas de los portavoces de la oposición», ha remarcado, convencido de que comportamientos «hipócritas» como los suyos contribuyen «a la desafección» de los ciudadanos ante la política.
«Menos mal que en el Código Penal no está tipificada la hipocresía, algunos políticos se tienen la desafección de los ciudadanos ganada a pulso», ha subrayado el jefe del Ejecutivo, quien ha animado a ver «el vídeo» de su comparecencia en el Parlamento y, tras ser preguntado sobre si él firmó algún contrato en el ejercicio de sus responsabilidades, ha respondido que él «ni firmó, ni adjudicó, ni contrató» nada.
Por último, ha insistido en que su Ejecutivo trasladará «en los plazos requeridos» a los grupos de la oposición «todos los datos de todas y cada una de las legislaturas y de todos los contratos que soliciten». «Se va aclarar todo», ha garantizado, para añadir que él no se va a «callar» ni se deja «amedrentar» ni acepta «pactos de silencio».
Estrella Digital/EP