La grave crisis interna desatada por la propuesta de la líder del PP en Cataluña, Alicia Sánchez Camacho, de «reformar en profundidad» el modelo de financiación autonómica para contemple la «singularidad» de Cataluña y «limitar» la solidaridad entre comunidades, ya ha quedado evidenciada. Este martes, el presidente del Gobierno y líder de os ‘populares’, Mariano Rajoy, ha convocado un Comité Ejecutivo para el próximo lunes. Tal y como han informado a ESTRELLA DIGITAL fuentes del Partido Popular, en Génova esperan que asistan todos los barones autonómicos. ¿El objetivo? tranquilizar a todos los presidentes autonómicos que ya se han alzado en armas contra la propuesta de Sánchez-Camacho.
En la mañana de este martes, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ya ha intentado apagar el incendio desatado antes de su reunión con la dirigente ‘popular’. En una entrevista concedida a la Cadena Ser, el titular de Hacienda no sólo ha dejado claro que en la agenda del Gobierno la prioridad que está marcada en rojo es la de «salir de la crisis», sino que además ha confirmado en público lo que este diario ya adelantaba este lunes, que el Ejecutivo y el Partido Popular no consideran que éste sea el «mejo momento» para abrir este melón. «Esta tarea no toca hasta el segundo semestre de 2014», ha zanjado Montoro, quien además ha añadido que no cree que una reforma de la financiación autonómica sea parte de la salida de la crisis sino, al contrario, que una vez que mejore la situación económica habrá mejor «caldo de cultivo» y menos «enfrentamiento» para negociar el nuevo modelo. «La financiación autonómica no es fácil y hacerla en medio de la crisis donde todavía hay un deterioro importante del mercado de trabajo es el peor de los escenarios», ha argumentado, pidiendo a todo el mundo, «y también al Partido Popular de Cataluña», que se hable «de lo que verdad importa a la mayoría de los catalanes, la salida de la crisis».
No obstante, este lunes la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ya levantó un muro de contención. En ningún momento quiso desautorizar públicamente a la dirigente catalana, pero lanzó varias píldoras interesantes. En primer lugar tildar de «opinión» y no de «propuesta» la idea de Sánchez-Camacho, y en segundo lugar marcar la línea roja del PP: la igualdad entre los españoles es sagrada. Además, el detalle de que la catalana no compareciera junto a Cospedal en Génova, teniendo en cuenta que era la primera vez que Camacho era invitada al Comité de Dirección, también resulta interesante. Desde Génova, insisten en que la catalana tenía prisa, pero lo cierto es que la dirección nacional y la regional están muy lejos de entenderse en esta cuestión.
Tanto es así, que el portavoz parlamentario del PP en el Congreso, Alfonso Alonso, se ha manifestado este martes en la misma línea, aunque él ha ido un paso más allá y ha dejado claro que «este modelo de financiación no le gusta a nadie». «Nosotros nos opusimos a este modelo desde el principio», ha zanjado el diputado ‘popular’ en la rueda de prensa posterior a la Junta de Portavocez celebrada en el Parlamento.
Aún así, ninguna de estas manifestaciones públicas parecen suficientes para calmar el alboroto generado en el seno del partido. Por ello, el presidente Rajoy ha decidido convocar al Comité Ejecutivo -que no se reunía desde el pasado 2 de septiembre- y calmar así los ánimos. El partido, a su vez, ha difundido, tal y como informa Europa Press, un argumentario interno en el que pone en valor el esfuerzo que hace el Gobierno de Rajoy para ayudar a las comunidades, tratando así de calmar el debate interno abierto en sus filas por la financiación. En concreto, los ‘populares’ recuerdan que el Gobierno ha puesto a disposición de las CCAA más de 70.000 millones a través del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) y el Plan de Pago a Proveedores. Se trata, destaca, de mecanismos financieros para garantizar la liquidez de autonomías y ayuntamientos «que ya está dando resultados».