El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha lamentado este martes que las palabras del expresidente del Gobierno, José María Aznar, están cargadas de «intransigencia, intolerancia y beligerancia» hacia Cataluña y sus aspiraciones democráticas.
En declaraciones a los medios tras la ofrenda floral en la tumba del expresidente catalán Lluís Companys, ha criticado que las declaraciones de Aznar son una demostración de que, tras 35 años de democracia, las instituciones del Estado tienen «una mentalidad intolerante» que deberían cambiar.
Mas ha lamentado que desde que Cataluña propuso el Estatut primero, y el pacto fiscal después, solo se ha encontrado con respuestas negativas: «Con el ‘no’ a todo no se construye nada».
En la ofrenda por el 73 aniversario de la muerte del expresidente Companys, Mas ha defendido que el proceso soberanista de Cataluña «anhela justicia y libertad» y es un proyecto de futuro pensado para los siete millones de catalanes.
Asimismo, ha asegurado que el mismo proceso, aunque mira sobre todo hacia el futuro, también es un «tributo» a las personas que en los últimos años y siglos han perdido su vida para defender Cataluña, como Companys, que murió fusilado por tropas franquistas.
Mas ha considerado que pese a que el expresidente republicano es recordado como un mártir, por encima de todo fue un «presidente digno», y su trayectoria y fusilamiento dejaron una huella muy importante que pese al paso de los años sigue siendo muy viva, ha argumentado.
Pese a que han pasado 73 años de su muerte, Mas ha considerado que no es un hecho tan lejano, ya que, por ejemplo, cuando Companys murió, el exconsejero de Cultura Max Cahner que falleció este lunes ya tenía tres años, ha recordado.
Mas ha destacado que con la ofrenda de este martes a Companys no sólo se homenajea al expresidente asesinado, sino también a todas las personas que murieron por defender un país, por ser catalanistas, y por defenderse «de una violencia extrema de los que habían subvertido el orden legal».