El abogado de Rosario Porto, José Luis Gutiérrez Aranguren, ha confiado este miércoles en que el psiquiatra Narciso Carrero, que declara en sede judicial acusado de revelación de secreto profesional, «pague por lo que hizo indebidamente» contra su clienta tras desvelar informaciones relativas al periodo en el que atendió a la madre de Asunta Basterra en la clínica La Robleda.
Gutiérrez Aranguren ha llegado a los juzgados de Santiago de Compostela poco antes de las 10.00 horas de este miércoles para asistir a la declaración del psiquiatra, citado como imputado por el Juzgado de Instrucción número 2, el mismo que lleva el caso por la muerte de Asunta Basterra. Poco después ha llegado a Fontiñas el psiquiatra Narciso Carrero, que no ha querido hacer declaraciones a los medios.
Sobre la declaración de este miércoles, Aranguren ha asegurado no esperar «gran cosa», dado que, decida declarar o no el psiquiatra, «lo que es evidente es que hay muestras gráficas sobradas de sus comparecencias y de sus manifestaciones, un hecho objetivo e incuestionable».
«No sé si pretenderá dar algún tipo de explicación a esta situación, pero no la tiene», ha indicado el letrado de Rosario Porto, que interpuso una denuncia por este caso y actúa como acusación.
Sobre las posibles consecuencias que reclama para el médico, Aranguren ha mencionado la «inhabilitación», así como «una pena de prisión, baja evidentemente y de no cumplimiento». «No creo que tenga problemas prácticos de cara a futuro, pero sí que dé a mi cliente la satisfacción de pagar por lo que hizo indebidamente», ha sentenciado.
«Perfil de psicópata injustificado»
Para Gutiérrez Aranguren las declaraciones de Narciso Carrero han perjudicado a su clienta, dado que han «redondeado» un «perfil de psicópata absolutamente injustificado». Estas consideraciones, «puestas en boca de una persona que se supone experta en psiquiatría» han conllevado que la opinión pública tenga «una peor opinión» de Porto, para su letrado.
Finalmente, Gutiérrez Aranguren ha confirmado que ya han concluido las sesiones del examen psiquiátrico al que se estaba sometiendo a Rosario Porto en el Imelga, aunque todavía no ha recibido ninguna información al respecto.