El ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo, ha confirmado este viernes que el primer viaje al extranjero de los nuevos Reyes será al Vaticano, y que después se desplazarán a los países vecinos de España, Marruecos, Francia y Portugal.
En una entrevista en Los Desayunos de TVE, ha relatado que Don Felipe y Doña Letizia tuvieron desde el primer momento «una comunicación muy fluida y muy fácil» con el Papa Francisco, cuando asistieron a la misa de su entronización. «El Papa es una persona muy cercana y los Reyes también lo son», ha dicho.
Margallo no ha facilitado las fechas de estos viajes, pero sí ha admitido que ya están fijadas y ha confirmado también que en septiembre Don Felipe acudirá a la Asamblea General de la ONU para presentar la política exterior de España y a pedir el voto para que España sea miembro del Consejo de Seguridad de la ONU en 2015 y 2016.
Para este objetivo, el ministro ha dicho que las negociaciones van bien pero que será «muy difícil», porque España compite con Turquía y Nueva Zelanda por dos puestos y es probable que estos países estén destinando más medios económicos. Antes del viaje del Rey a Nueva York, el presidente del Gobierno tendrá ocasión de reunirse con los líderes de la Unión Africana (54 votos), y los de la Comunidad del Caribe (CARICOM, 14 votos) y el propio Margallo verá en agosto a los del Pacífico, que suman 16 votos.
Margallo ha justificado la ausencia de líderes internacionales en la Proclamación de Felipe VI por la «premura» de la sucesión y ha asegurado que están llegando «manifestaciones de simpatía y solidaridad espectaculares» de todas partes del mundo. Junto a estos primeros viajes, el ministro espera que los reyes visiten -aunque no ha hablado de plazos- todas las capitales europeas.
El jefe de la diplomacia ha destacado que la presencia internacional «forma parte del ADN» de la Corona y ha asegurado que Don Felipe tiene «especial vocación y preparación», que conoce bien los temas europeos y que tiene claro que no son política exterior, sino interior.
El papel de la Reina
En cuanto al papel de la Reina Letizia, cree que le corresponderá el «papel esencial de apoyo humano», incidiendo en que la política es una tarea de alto riesgo y todos los días se necesita el apoyo de la persona que está más cerca de ti, que es tu pareja».
Y además de eso, está convencido de que «seguirá los pasos» de la Reina Sofía y se implicará en el «aspecto tan humano y sustancial» de la política exterior que es la cooperación y la ayuda humanitaria. Ahora que hay menos medios, ha dicho, «a lo mejor hay que suplirlos con más presencia de todos», ha dicho.
No obstante, también cree que la Reina Sofía seguirá activa en el ámbito de la cooperación internacional. Margallo ha relatado el «enorme» interés de la madre del Rey en la política exterior, una «faceta más desconocida» que él ha presenciado, incluso recientemente durante la reunión del Club Bildeberg en Copenhague, pocos días antes de la abdicación del Rey.
Aforamiento del Rey Juan Carlos
En cuanto al aforamiento de Don Juan Carlos, ha opinado que sería absurdo que el exjefe de Estado no tuviese «un estatus similar» a los 10.000 que sí lo tienen, y que no quiere decir que sean inviolables, sino que tienen que ser juzgado por el Tribunal Supremo.
Para Margallo, el momento más emotivo de los actos de proclamación de Don Felipe fue el abrazo que le dio Don Juan Carlos. Del discurso del Rey, el ministro ha destacado sus llamamientos a la regeneración de las instituciones para «recuperar la afección ciudadana», el que hizo contra la crisis y el desempleo y sus alusiones a la España «unida y diversa» y con un papel en el mundo.