El Ayuntamiento de Barcelona ha empezado a notificar este miércoles el orden de cierre de pisos turísticos irregulares que los inspectores municipales han localizado en el barrio de la Barceloneta.
Fuentes municipales han informado a Europa Press de que los técnicos han emitido 24 órdenes de cese de las actividades entre el lunes y el martes, aunque una de ellas afecta a varias viviendas en concreto por estar en la misma finca; así, en total se ha ordenado el cierre de 35 pisos turísticos.
Una vez reciban esta orden, los propietarios de los pisos deben finalizar la prestación de actividades comerciales, y tienen diez días para presentar alegaciones al registro municipal.
El Ayuntamiento anunció un refuerzo de las inspecciones municipales, con la dotación de tres equipos especializados en la Barceloneta, tras las protestas de vecinos contra los pisos turísticos irregulares y del incivismo de algunos turistas.
La novedad de la ronda de inspecciones iniciada el lunes es que se hacen de oficio, de forma aleatoria y sin necesidad de recibir una queja de los vecinos, como ocurría hasta ahora.
El equipo lo integran seis profesionales, que revisan aleatoriamente algunos de los 8.000 pisos que en total hay en este barrio, que nació a mediados del siglo XVIII y donde habitan alrededor de 15.000 personas, según las últimas estadísticas demográficas.
Las medidas del equipo de gobierno también incluyen un incremento de la presencia policial y de los agentes cívicos en el barrio y crear una mesa de seguimiento con los vecinos que evalúe la efectividad de las medidas, y el alcalde de la ciudad, Xavier Trias, ha asegurado que no tiene reparos en despachar cada mes con los vecinos para analizar la evolución de la situación.
A lo largo de este año, se han incrementado las quejas de los vecinos contra los pisos turísticos: si en 2013 se registraron 54, este año la cifra se sitúa en las 109, 50 de las cuales se han producido este agosto.