El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha explicado que el viernes no vio la comparecencia de Pujol porque estaba trabajando en el decreto de convocatoria de la consulta, pero le han relatado que en algunas intervenciones no se mantuvieron las formas.
Mas dice que aún no ha podido hablar con el expresidente pero prevé hacerlo en los próximos días, y reconoce que los partidos «quizá sí se esperaban que contestase algunas preguntas más», pero ha destacado su actitud.
«Él sabía que hizo una cosa mal hecha» –ha constatado– y ha tenido tanto el coraje de reconocerlo como el de comparecer en el Parlament para explicarse.
El líder de CiU ha negado asimismo que su padre fuera testaferro del testamento del padre del expresidente Jordi Pujol, como Alícia Sánchez Camacho (PP) preguntó el viernes a Pujol, que no lo respondió en su comparecencia en el Parlament sobre su dinero sin regularizar en el extranjero.
«¿Mi padre? Ya se lo digo yo: no. ¡Si mi padre y el presidente Pujol prácticamente no se conocían! Se habían hablado alguna vez», ha dicho al preguntársele durante una entrevista de TV3.
Mas ha recordado que está a punto de aprobarse una comisión de investigación del Parlament sobre «el fraude en general», y se ha mostrado dispuesto a comparecer si se lo piden los grupos, además de admitir que estaría obligado a acudir.
Sobre si él está limpio de corrupción, ha respondido: «¿Limpio de corrupción? Creo que sí. Siempre que me he comportado de una manera que creo correcta», pero ha constatado que la Generalitat está compuesta por muchas personas y puede que haya quien deba explicarse, por lo que ha defendido que precisamente para eso estará la comisión de investigación.
Informes y guerra sucia
Sobre las acusaciones de 'guerra sucia' desde el Estado en contra del proceso soberanista y si se espera que esto ocurra ante la cercanía de la consulta, ha contestado: «No sé si saldrán más informes; porque también han fabricado informes, ¿eh?».
«No sé qué pasará desde ahora, pero sé lo que ha pasado hasta ahora, y concretamente en mí, y ¿qué han demostrado de las acusaciones que se me hacían? Nada», ha dicho al lamentar que se le acusó de haber robado, de haberse llevado dinero al extranjero y de haber utilizado a su padre como testaferro.
Mas también ha destacado la reciente información según la cual el jefe de gabinete del presidente Mariano Rajoy, Jorge Moragas, envió SMS a la exnovia del primogénito de Jordi Pujol presionando para que llegara hasta el final en sus revelaciones sobre el dinero de los Pujol.
«Tuvimos una evidencia hace unos días con el jefe de gabinete del Gobierno español», ha lamentado Mas sobre la actitud del Estado, y considera que estos SMS son una prueba de que Moragas no exponía una posición neutra.
«No me han dado ninguna explicación (desde el Gobierno central) ni yo tampoco la he pedido», ha dicho.