El jefe de Microbiología del hospital 12 de Octubre de Madrid y miembro del Comité de especial contra el ébola, Rafael Delgado, ha señalado que las noticias sobre el estado de salud de la auxiliar de enfermería Teresa Romero «hacen albergar algún optimismo» sobre su recuperación.
No obstante, ha pedido «prudencia», ya que «es una enfermedad sujeta a complicaciones», según ha explicado en una entrevista en la Cadena Ser.
El experto, que ha recordado que toda la información de la paciente el corresponde a su equipo clínico, tiene la esperanza de que «se cumplan las expectativas de recuperación» y pueda volver a incorporarse a su labor como sanitaria.
Asimismo, ha pedido «apoyo y respeto» para el equipo médico que, ha añadido, «está haciendo una labor realmente extraordinaria», del mismo modo que Teresa, quien formó parte de ese «excelente grupo de personas» que cuidaron a los misioneros Miguel Pajares y Manuel García Viejo, quienes fallecieron víctimas del ébola este verano.
En una entrevista realizada, posteriormente en Antena3, ha reiterado que las personas en observación ingresadas en el Hospital Carlos III-La Paz de Madrid «no son enfermos».
«Han estado en exposición al virus, pero no suponen ningún riesgo para la salud. No suponen ningún riesgo para le resto de la población, hacen vidas normales salvo que necesitan una observación en ese periodo de 21 días. Una vez terminado ese periodo estarían absolutamente libres de la infección», ha añadido.
Hay que actuar en África
Por otro lado, entiende que inicialmente no debería haber riesgo para la población general de contagio por la utilización de bases españolas para el tránsito del contingente que va a enviar EEUU a África occidental para luchar contra la epidemia de ébola.
«Estas operaciones deben hacerse con el protocolo de seguridad, la situación de España es especial geográficamente y la propuesta puede tener un cierto sentido«, ha añadido.
En su opinión, hay que ser conscientes de que el foco principal está en una zona muy delimitada de África, «donde prácticamente se están duplicando los casos cada semana», y «es ahí donde hay que realizar un esfuerzo internacional». Una labor que ya ha empezado desplegarse con la visión de que «sin controlar el problema en esa región es muy probable que puedan aparecer focos».
En cualquier caso, no tiene duda de que en los países desarrollados, como es el caso de España, esos focos «van a ser controlados» porque «los países avanzados tienen servicios de salud muy competentes y no va a dar grandes problemas para la población», aunque entiende «preocupación» existente en la población.
No obstante, ha admitido que «mientras se mantenga el foco de manera incontrolada y creciente es posible que algunas de las personas infectadas puedan llegar a otros países», aunque reitera que en el caso de España el Sistema de Salud y el de Vigilancia Epidemiológica son capaces de controla la infección.