«Las cosas habrían ido mejor si Pujol hubiera optado por mí y Mas diría que han ido mejor con él«. Así de contundente se ha mostrado Josep Antoni Duran i Lleida en una entrevista publicada este domingo en el diraio La Vanguardia tras dimitir como presidente de Unió Democràtica.
El dirigente democristiano también ha aseguraod que su relación con Mas fue fría en los inicios, pero que se ha vuelto más afectuosa. También ha subrayado que siempre ha intentado trabajar por el catalanismo político y por Cataluña, y ha pedido memoria sobre la contribución de su partido a los logros de CiU: «Mire cómo le va ahora a CDC sin Unió y a Unió sin CDC«.
Duran ha destacado a Jordi Pujol, al expresidente del Gobierno Felipe González y al exalto representante para la política exterior europea Javier Solana entre las personalidades políticas que más le han marcado, ha insistido en que les gustaría ser recordado como alguien que hizo «lo que pudo y que lo que pudo lo hizo bien».
En la que será su última carta web semanal, Duran ha explicado su dimisión porque tras los resultados del 27S y del 20D «no hay excusas, no sirven justificaciones».
El líder democrisitano ha explicado su renuncia porque cree que él no podía mirar hacia otro lado como si no hubiera pasado nada, pero ha asegurado que Unió podrá remontar. Duran ha valorado que en «cualquier sociedad madura», el dirigente de un partido al que le pasa lo que le ha pasado a él tiene que dimitir.
Descartadas las elecciones anticipadas catalanas del 6 de marzo, Duran se ha mostrado convencido de que «no habrá elecciones como mínimo en un año», y ha considerado que ha llegado la hora de tomar su decisión, antes del congreso nacional del partido el 16 y el 17 de abril.
Además, ha afirmado que sigue a disposición del partido, puesto que ha dicho que tiene «mucho que aportar a Unió, a la política y a Cataluña», sin embargo, no lo hará estando en primera línea.