El presidente del Gobierno en funciones y presidente del PP, Mariano Rajoy, ha asumido este viernes que a su partido ha podido faltarle diligencia para combatir la corrupción pero ha subrayado que el PP tiene las cosas claras: «El que no haga lo que es debido, se va».
No obstante, también ha subrayado que el PP es un partido con 800.000 militantes y muchos cargos públicos en todos los niveles, y que no va a aceptar «de ninguna manera» que se haga «una causa general» contra el PP
Rajoy se ha expresado así en una intervención ante la Junta directiva del PP de Castilla y León, pocos días después de la 'operación Taula' en la que han sido detenidos varios excargos del PP valenciano,
«La corrupción le ha hecho daño a este partido, todos lo sabemos. Hemos actuado, a lo mejor no hemos sido todo lo diligentes que hubiéramos tenido que ser pero es fácil hablar a toro pasado«, ha dicho al final de su discurso.
Así, ha reconocido que los españoles han «castigado» al PP por sus «equivocaciones» -«otros no se equivocan nunca», ha ironizado- pero cree que también han reconocido sus «méritos», como ha sido presentar «el mayor paquete legislativo» contra la corrupción y dejar actuar con libertad a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado (CFSE) y a la Justicia.
Rajoy ha recalcado su voluntad de que «estas cosas no se vuelvan a producir jamás en el futuro». «Y si se producen actuaremos con la contundencia que la situación requiere», ha remachado.