Las llamas han consumido la pasada edianoche los monumentos de cartón y madera que durante cuatro días han decorado las calles de Alicante con motivo de las fiestas de las Hogueras y que han puesto el tono satírico a la actualidad política en vísperas de las elecciones generales del próximo domingo.
Esta celebración es conocida como 'la nit de la cremà' y en ella se reducen a ceniza un total de 184 monumentos, algunos de más de 20 metros de altura, repartidos por toda la ciudad.
El fuego, que levanta el telón del periodo estival en la capital alicantina, comenzó a medianoche tras el disparo de una palmera de fuegos artificiales desde uno de los torreones del Castillo de Santa Bárbara, que domina la ciudad y la bahía de Alicante.
Este majestuoso espectáculo aéreo tiñió el cielo de fogones blancos en una tradición que se interpreta en Alicante como el «llorar» de la palmera por la «tristeza» que genera el final de las fiestas. Acto seguido, el fuego manifestó su fuerza con la 'cremà' de la hoguera oficial, plantada en la plaza del Ayuntamiento, obra del artista Pedro Espadero y de nombre 'Legado'.
El acto, que muchas personas entienden como purificador, ha provocado las lágrimas de la Bellea del Foc, Ana Belén Castelló, y de la Bellea Infantil, Adriana Nicolás. Junto a ellas han estado el president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, el alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri, el presidente de la Federación de Hogueras, Manolo Jiménez, y otros miembros de la corporación municipal.
Tras la oficial, ha sido el turno de la hoguera Calvo Sotelo, posteriormente de la de Florida Portazgo, y así sucesivamente se irán quemando a lo largo de la noche los restantes 178 catafalcos ante la presencia de miles de alicantinos y turistas.
La hoguera «Neo-Mística» del distrito Séneca-Autobusos, ganadora en la categoría especial por segundo año consecutivo y que ha tenido un presupuesto para este año de 70.000 euros, arderá cerca de la una y media de la madrugada.
Mientras el fuego consume los monumentos, los bomberos procederán a mojar a los asistentes con el agua de las mangueras, en una ceremonia conocida como la «banyà».
El día grande de las fiestas de Alicante había empezado pronto, con la despertá por las calles a base de petardos a partir de las 8 de la mañana, y ha tenido como punto de gran atracción la última mascletá de las fiestas, en la que la pirotecnia Hermanos Ferrández (Murcia) han empleado 150 kilogramos de pólvora.
Crítica política
La «nit de la cremá» se celebró en esta ocasión con un gran número de ninots satíricos dedicados a los cuatro aspirantes a Presidente del Gobierno y a la repetición de las elecciones que tendrán lugar el próximo domingo.
El president de la Generalitat ha querido resaltar, en declaraciones a algunos medios, «los meses de trabajo e ilusión» que culminan en esta noche «muy especial» y ha avanzado que su intención es estar presente todos los años, pues es «lo razonable».
Por su parte, Echávarri ha calificado estas Hogueras como «espectaculares» y ha destacado que «los índices económicos han sido los mejores de la historia».
El edil de Seguridad, Fernando Marcos, ha resaltado que han sido unas hogueras «muy tranquilas» en lo que respecta a incidencias, a pesar incluso de haber alcanzado «un millón de visitantes».
La noche se prolongará hasta bien avanzada la madrugada, cuando los casi 40 equipos de bomberos habrán sofocado los últimos rescoldos en todos los rincones de Alicante.
Además de los bomberos, en el operativo de la «nit de la cremá» participan alrededor de 300 efectivos de la policía local y voluntarios de Protección Civil para tratar de garantizar la seguridad.
Redacción