El debate de investidura de Mariano Rajoy se reanuda a las 9.00 de la mañana con la respuesta del líder socialista, Pedro Sánchez, al discurso que hizo este miércoles el candidato del PP, y a la que seguirán los discursos y posiciones del resto de portavoces del Congreso.
Rajoy escuchará así la posición de los demás partidos tras escuchar un discurso en el que el presidente en funciones se colocó como la única alternativa «viable» y «seria» de gobierno y advirtió a todos los grupos parlamentarios de que son «corresponsables» de desbloquear la situación o provocar, en su caso, que haya nuevas elecciones generales.
Según la ordenación del debate, Pedro Sánchez abrirá la intervención de los portavoces de los demás grupos parlamentarios, que será de mayor a menor representación, y que contarán con un tiempo inicial de 30 minutos, una réplica de diez minutos y una posible dúplica de otros cinco minutos.
A continuación se celebrará la primera votación, prevista aproximadamente hacia las 18.00 horas, en la que Mariano Rajoy necesita mayoría absoluta para ser investido, esto es, 176 votos a favor, aunque de momento sólo cuenta con 170, los del PP, Ciudadanos y Coalición Canaria.
De no salir adelante, esta primera votación marcará la hora del segundo escrutinio, que se celebrará el viernes 2 de septiembre, 48 horas después de la primera.
En ella, Rajoy ya sólo necesitaría mayoría simple, es decir, más votos a favor que en contra. De resultar fallida ambas votaciones, se pondrá en marcha el calendario para la convocatoria de nuevas elecciones generales.
Si antes de dos meses ningún candidato resulta elegido, el próximo 31 de octubre se volverían a disolver las Cortes y 54 días después se celebrarían nuevas elecciones, el 25 de diciembre, día de Navidad.
El debate de hoy se abre con Pedro Sánchez, quien según fuentes socialistas defenderá el «no» a la investidura de Rajoy por considerar que su programa de gobierno es «continuista» y «conservador» y no elimina ninguna de las medidas lesivas, como la reforma laboral.
Sánchez responderá a las llamadas que ha hecho Rajoy a la responsabilidad del PSOE para que le permitan con una abstención formar gobierno.
Tras el discurso que ha ofrecido esta tarde el presidente en funciones y candidato a la reelección, los socialistas han mantenido que no tienen «ninguna razón» para replantearse su voto en contra y han hecho hincapié en que Rajoy se ha presentado como un «burócrata» y un «político cansado», cuyo proyecto está «agotado».
Sánchez basará también su no a la investidura de Rajoy en los casos de corrupción del PP y argumentará que la regeneración de ese partido pasa por mandarle a la oposición y no por «indultarlo», que es lo que a su juicio significaría permitirle mantenerse en la Moncloa.
Fuentes cercanas al secretario general han recordado que éste rechazará por «continuista» y «conservador» el acuerdo alcanzado entre el PP y Ciudadanos.
Sánchez aludirá al discurso que hizo Mariano Rajoy en su debate de investidura fallido de hace seis meses, pero no a las «desafortunadas expresiones en tono displicente que utilizó para menospreciar el acuerdo con Ciudadanos». Y no lo hará «por respeto a las formaciones que ahora lo han alcanzado».
El líder socialista recorrerá en su intervención el legado político de Rajoy y lo que ha supuesto cuatro años de mayoría absoluta del gobierno popular en materia laboral y económica, repasando las promesas electorales que realizó en el 2011 y contrastando con la realidad de esta legislatura.
La -a su juicio- «nefasta» política territorial, la «engañosa» política fiscal o la «inexistente» política europea e internacional serán también objeto de crítica por parte del líder del PSOE, según las fuentes.
Argumentará además que los cuatro años de gestión de Rajoy y los últimos ocho meses han provocado cuatro fracturas en España: social, territorial, política y de oportunidades, y le dirá «quien ha provocado estas cuatro facturas no puede erigirse como solución».
EFE