Un grupo de militantes del PSOE de Sevilla ha reclamado, a través de una carta remitida al presidente de la comisión gestora del partido, Javier Fernández, que la dirección promueva una consulta a la militancia sobre el sentido del voto de los diputados socialistas en la investidura.
«Os animamos a que no os dé miedo convocar a la militancia; si nos equivocamos, nos equivocaremos todos y, una vez más, entre todos sacaremos adelante las ideas del socialismo», aseguran en una carta abierta una veintena de militantes, entre los que figuran la secretaria de la agrupación sevillana de Miraflores, Eva Patricia Bueno, y el exsecretario de UGT de Sevilla Juan Antonio Gilabert.
«¿De verdad crees, querido compañero, que los socialistas vamos a aceptar sin más una decisión del Comité Federal, del mismo Comité Federal que la pasada semana dio un bochornoso espectáculo que nos sumió a todos en la tristeza y la vergüenza?», interpelan a Fernández en la misiva.
Los firmantes, varios de ellos militantes veteranos, subrayan que los socialistas no pueden «claudicar» ante la derecha «en aras de una supuesta estabilidad».
«¿Estabilidad de quién? ¿Estabilidad para qué?», se preguntan antes de sostener: «Para que sigan recortando las políticas sociales; para que sigan desarrollando políticas contra los trabajadores y el sindicalismo de clase y para liquidar los avances alcanzados con el estado de bienestar«.
Citando a Julián Besteiro cuando durante un acto en agosto de 1933, señaló: «Yo no quiero ser dictador de nadie, ni que nadie me obedezca ciegamente; pero tampoco quiero sufrir la dictadura de nadie», los firmantes de la carta reclaman una consulta convencidos de que «sea cual fuere el resultado, el partido saldrá unido y cohesionado para enfrentarse a los duros tiempos que están por venir».
«No dudamos de la legitimidad de los órganos democráticamente elegidos para tomar decisiones», aseguran, aunque consideran imprescindible la consulta «en aras a preservar la unidad del partido».
«Oponerse a esta consulta con argumentos como los esgrimidos por una destacada dirigente en el sentido de que los militantes no tenemos la debida información para pronunciarnos, es cuando menos temerario», advierten los militantes, que apostillan: «¿Acaso tuvimos información en su día para pedir el sí a la OTAN? ¿Acaso tuvimos información para explicar la reconversión industrial?».