El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha asegurado hoy, antes de la reunión con el líder regional de Podemos tras la ruptura del pacto de investidura, que su idea es «retomar el diálogo» ya que en estos quince meses de legislatura ha sido «bastante ágil y bastante fructífero».
En declaraciones a los periodistas tras la entrega de reconocimientos a los artesanos en el marco de la Feria de Artesanía de Castilla-La Mancha, García-Page se ha referido a la reunión que este mediodía mantiene con el secretario general de Podemos Castilla-La Mancha, José García Molina, 17 días después de que Podemos anunciara que rompía el acuerdo de investidura.
Ha señalado que los ciudadanos «lo que esperan es que resolvamos problemas» y ha indicado que en estos quince meses «realmente hemos avanzado mucho en la región, hemos retomado muchos problemas» y «enfocado» muchas soluciones.
García-Page quiere «compartir ese diagnóstico» con Podemos porque no pretende «ni resolverlo todo ni acabar con todo» sino establecer «con normalidad» un diálogo y hablar de las políticas que hay que mejorar.
Ha dejado claro que Castilla-La Mancha no puede ser «moneda de cambio para nada, ni para otro tipo de cambalaches políticos ni para otro tipo de escenarios políticos».
En este sentido, ha reflexionado que «aunque fueran las cosas muy bien a Podemos y al PSOE en España, eso no tendría que traducirse que nos fuera bien aquí» del mismo modo que el hecho de que «no haya el mejor entendimiento entre el PSOE y Podemos en España no va a hacer que apartemos la agenda o que confundamos los intereses de los ciudadanos de Castilla-La Mancha».
El presidente del Ejecutivo regional ha enfatizado que la gente ya se pronunció hace quince meses «y creo que estamos siendo fieles a ese compromiso», por lo que «si alguien discrepa o quiere matizar o quiere mejorar la situación, estamos abiertos».
Esto es, a su juicio, «lo razonable, lo normal», ha indicado Emiliano García-Page.
EFE