El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, llamará a Mariano Rajoy justo después de su investidura para pedirle una reunión con el fin de exponerle su propuesta de referéndum pactado y recordarle que el Parlament ha aprobado votar, con o sin aval del Estado, como muy tarde en septiembre de 2017.
Tras la reunión de hoy del Govern, Munté ha confirmado que Puigdemont tiene intención de llamar a Rajoy tras su investidura, para «felicitarlo» y para sugerirle un encuentro «lo antes posible» para explicarle la resolución sobre el referéndum que aprobó el 6 de octubre el Parlament, con los votos de Junts pel Sí y la CUP.
Según Munté, el presidente catalán mantendrá la «propuesta de diálogo» y de «sentarse a negociar» los términos de un referéndum acordado.
Pero la «insistencia en esta vía pactada», ha advertido, no neutraliza la consigna de Puigdemont de «referéndum o referéndum», haya o no acuerdo con el Estado, para disponer de un mecanismo que permita «contar» a los partidarios y detractores de la independencia de Cataluña.
En un eventual encuentro entre Puigdemont y Rajoy surgirían también otras cuestiones que «no tienen nada que ver con el proceso soberanista», como el documento con 46 reivindicaciones que el presidente de la Generalitat le trasladó en la reunión del pasado 20 de abril, pero Munté ha advertido de que «ahora hay unos mandatos» parlamentarios nuevos, que hacen referencia al referéndum.
Preguntada por el hecho de que el rey Felipe VI haya abogado por «desdramatizar» cuestiones como la reforma de la Constitución, Munté ha dado la «bienvenida» a «cualquier llamamiento al diálogo», aunque ha advertido de que por ahora «no se puede concretar en nada», y menos aún un cambio en profundidad de la Carta Magna.
«Teniendo en cuenta la situación del PSOE, la propuesta federal de la Constitución queda muy debilitada», ha señalado.
Efe