Los ocho diputados del PSOE que rompieron la disciplina de voto en la investidura de Mariano Rajoy presentarán este lunes sus alegaciones para evitar que el grupo parlamentario socialista les imponga sanciones, que podrían llegar a una multa de hasta 600 euros para cada uno.
Los otros siete diputados del PSC que también se saltaron la disciplina de voto y rechazaron la investidura de Rajoy presentaron ya sus propias alegaciones, en las que aseguran que decidieron no abstenerse para cumplir el mandato del Consell Nacional de su partido.
La pretensión de los ocho diputados del PSOE -Susana Sumelzo, Margarita Robles, Zaida Cantera, Odón Elorza, Rocío de Frutos, Luz Martínez Seijo, Pere Joan Pons y Sofía Hernanz– es presentar un mismo escrito con su postura contraria a que se le imponga un castigo, según han informado fuentes de este grupo.
Los díscolos advierten además de que, si la dirección del grupo va más allá de una mera sanción económica y acomete una «purga» para apartarles de los cargos y las portavocías que ocupan, ello sólo contribuirá a ahondar aún más la división que sufre el partido.
Y es que una vez superado el debate de investidura, la gestora y la dirección del grupo socialista prevén hacer algunos ajustes en el organigrama.
Se da por hecho que Antonio Hernando seguirá como portavoz después de abandonar la tesis del «no es no», que predicó junto a Pedro Sánchez y pasar a defender la abstención.
Entre los diputados que votaron en contra, algunos son portavoces de comisiones, como los catalanes Manuel Cruz (Educación) y Mercé Perez (Pacto de Toledo) y otras adjuntas, como Rocío de Frutos (Empleo) y la independiente Zaida Cantera (Defensa).
Después de que hoy se presenten las alegaciones, el responsable de disciplina, Luis Carlos Sahuquillo, elevará su informe a la dirección del grupo parlamentario.
El Comité Director trasladará a su vez su dictamen al Comité Permanente -donde están también los portavoces de las comisiones-, que decidirá en última instancia las posibles sanciones y si remite el expediente a la gestora del PSOE para que pueda tomar sus propias medidas disciplinarias.
EFE