Unas 80.000 personas, según la Guardia Urbana, se han concentrado hoy en Barcelona bajo el lema «Por la democracia, defendamos nuestras instituciones» en apoyo a los cargos electos soberanistas investigados por los tribunales, una protesta para reafirmar la vía independentista ante la «justicia española».
La protesta contra la «judicialización» del proceso ha sido convocada por las tres entidades independentistas catalanas, la Asamblea Nacional Catalana, Òmnium Cultural y la Asociación de Municipios por la Independencia.
Entre las miles de personas que han llenado la avenida Reina María Cristina había dirigentes como el expresidente catalán Artur Mas, la presidenta del Parlament, Carme Forcadell; el exconseller Francesc Homs, el vicepresidente catalán, Oriol Junqueras, y el primer teniente de alcalde de Barcelona, Gerardo Pisarello, quien, a diferencia de los dirigentes independentistas, se ha situado en un segundo plano, lejos de las cámaras.
En la tarima de la cabecera de la protesta se han situado al final muchos de los más de 400 representantes investigados por la justicia, según cálculos de los organizadores.
Es el caso de Artur Mas, Carme Forcadell, las exconselleres Irene Rigau y Joana Ortega, la alcaldesa de Berga (Barcelona), Montse Venturós (CUP), y el concejal de Vic (Barcelona), Joan Coma.
Entre 'estelades' y carteles de «No tenemos miedo», se han oído proclamas como «independencia» o «fuera, fuera, fuera la justicia española».
Las causas abiertas, que afectan también a 259 ayuntamientos según la ANC, recogen desde cuestiones vinculadas a la consulta del 9N, no izar la bandera española en los ayuntamientos, pagar cuotas a la AMI o temas relacionados con la desobediencia a la justicia.
En concreto y según fuentes de la Delegación del Gobierno en Cataluña consultadas por Efe, hay 130 impugnaciones por incumplimiento de la Ley de Banderas, un centenar de impugnaciones contra las aportaciones de fondos a la AMI, así como un centenar más en contra de mociones de insumisión y soberanía fiscal.
También hay entre 60 y 70 impugnaciones por declaraciones sobre un «territorio catalán libre y soberano», 5 recursos vinculados a vulneraciones del reglamento que obliga a poner la efigie del Rey en el salón de plenos, entre 20 y 25 impugnaciones por el control de la suspensión de la paga extra y entre 15 y 20 resoluciones de impugnaciones en materia de recursos humanos
Se suman 6 recursos por irregularidades en materia de gestión económica y 12 recursos por diversas materias, como clubes de cannabis, plantaciones de marihuana y, como es el caso de Girona, la contratación de trenes para acudir a la manifestación de la Diada de 2012.
Dentro de sus funciones de control de la legalidad de los acuerdos adoptados por parte de las entidades locales, la Delegación del Gobierno en Cataluña, a través de la Abogacía del Estado, ha interpuesto así recursos contenciosos-administrativos en varias materias, en lo que suma unas 460 causas abiertas en estos momentos.
En esta confrontación judicial, la consellera de Presidencia, Neus Munté, y otros miembros del Govern han acudido a la manifestación de Barcelona, mientras que el presidente catalán, Carles Puigdemont, ha participado en otra concentración en su localidad natal, Amer (Girona), desde donde ha advertido de que Cataluña decidirá «en las urnas y libremente» su vínculo con España.
En declaraciones a los periodistas, Carme Forcadell ha subrayado que no contempla que la inhabiliten, porque «quien pone o quita» al presidente de la Cámara «son los diputados».
Artur Mas ha garantizado que se seguirán «jugando la piel» por el proceso, mientras que el portavoz del PDECAT en el Congreso, Francesc Homs, ha afirmado que esta manifestación «va dedicada al señor Rajoy».
La secretaria general de ERC, Marta Rovira, ha avisado de que se concentrarán «cuando haga falta» para defender a los electos que, a su juicio, «implementan el mandato democrático del 27S».
Asimismo, el concejal de la CUP en Vic Joan Coma ha afirmado que espera ser «detenido» próximamente como la alcaldesa de Berga tras negarse a ir a declarar ante el juez ya que, a su juicio, el Estado es «partidista» al «no haber separación de poderes».
El presidente de la ANC, Jordi Sánchez, ha ironizado sobre que Cataluña ya ha «superado a España», pues la manifestación ha llegado más de allá de la plaza de España de Barcelona, y se ha conjurado para «ganar» el referéndum independentista previsto para 2017.
«No nos resignamos, lo haremos», ha incidido Sánchez, que ha remarcado que seguirán con el proceso pese a los embates judiciales, pues «nunca» aceptarán que un tribunal, «por más Superior de Justicia de Cataluña que se diga, intente destituir» a Forcadell.
EFE