El expresidente del Gobierno Felipe González ha advertido hoy de que si no se quiere abrir el espacio a «propuestas disparatadas», en referencia a los populismos, hay que ofrecer «respuestas socialdemócratas del siglo XXI» que atiendan a los problemas que «importan» a los ciudadanos.
«No se puede reducir nuestro mensaje a decir que cuando gobiernen los populistas la situación será mucho peor porque la gente lo pasa mal y se siente discriminada; hay que responder a esa fragilidad del modelo con respuestas socialdemócratas del siglo XXI», ha reflexionado González, durante su intervención en el foro Joly en Sevilla, al que «se supone» que viene -ha ironizado- para «apoyar a Susana (Díaz)».
A la conferencia ha acudido la presidenta de la Junta y numerosos dirigentes políticos y cargos institucionales, así como los expresidentes andaluces Manuel Chaves y José Antonio Griñán, quienes comparten mesa con Díaz.
Al inicio de su intervención y tras lamentar que se «descontextualiza todo», se ha referido también a la entrevista difundida ayer que le hizo en julio una revista francesa de política internacional y ha confesado que le han «sorprendido» que haya habido «un montón de titulares» de prensa que «no tienen casi nada que ver» con lo que dijo.
A continuación, ha subrayado que su intención hoy es hablar de los problemas que afectan a Andalucía, a España y el mundo, por lo que ha pedido a los numerosos asistentes a la conferencia-coloquio que «no pierdan el tiempo en preguntarle por cosas que importan, pero mucho menos».
Así, ha llamado la atención sobre el hecho de que el «lío de las Cortes» por el candidato inicial del PP, Jorge Fernández Díaz, a la presidencia de la Comisión de Exteriores, haya copado los grandes titulares cuando «se ha suspendido la reválida, que afecta a 500.000 criaturas, sus familias y sus profesores».
«Pero eso no importa, sino el destino de Fernández Díaz y el destino de Podemos», ha lamentado.
Frente a ello, ha dedicado gran parte de su intervención, a los problemas de la globalización, el «brexit», los refugiados y Latinoamérica.
«Si Europa acogiera a un millón de refugiados el impacto sería de un uno por ciento sobre la población pero estamos aterrados por el otro», ha espetado.
Ha hablado también del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, para señalar que es «curioso en democracia» que lo que se espera es que no cumpla lo que se comprometió a hacer en campaña.
«Sólo hay un populismo más peligroso que el de izquierdas y es el de derechas», ha asegurado González, que ha apostillado: «Hay muchos que se quieren aprovechar: Putín, los hijos de Putin o Marie Le Pen».
En su opinión, la única «respuesta sensata» en Europa tras la elección de Trump ha sido la de Angela Merkel, que ha dicho que «quieren tener una buena relación con Estados Unidos pero no van a alterar sus principios».
Según González, el populismo no «camparía a sus anchas» si los que no se consideran populistas no estuvieran «fallando» en las respuesta a los problemas que plantea la globalización.
Por otra parte, ha aludido a la situación económica en España para advertir de que no es suficiente que haya empleo: «Hay que dignificar el trabajo, necesitamos ya este año la subida salarial, hay que compensar nuestra capacidad de exportación con un mayor consumo interno».
Y ha proseguido: «Si no se hace por ideología, que se haga por racionalidad; hay que acabar con la precarización en el empleo», ha sentenciado.
EFE