El ex asesor urbanístico del Ayuntamiento de Marbella (Málaga) y cerebro de la operación Malaya, Juan Antonio Roca, ha salido este sábado de la prisión provincial de Alhaurín de la Torre en el primer permiso de tres días que se le ha concedido desde que fue encarcelado en marzo de 2006.
Vestido con una chaqueta y sin corbata, alrededor de las 17:15 horas, Roca ha salido a pie de la cárcel ante una gran expectación mediática y se ha montado a continuación en un vehículo en el que ha abandonado el lugar.
Aunque ha asegurado a los numerosos periodistas que le rodeaban que no iba a hacer declaraciones, finalmente tan sólo ha apuntado que ya ha tenido «oportunidad de pedir perdón» por los delitos cometidos.
La Audiencia Nacional confirmó la semana pasada el permiso al apreciar que está colaborando para pagar sus responsabilidades civiles y en atención al buen comportamiento que tiene en la prisión.
Fuentes judiciales señalaron que Roca no podrá ir a Marbella, ya que el permiso se le ha concedido para fuera de dicho municipio malagueño, por lo que se trasladará a Murcia con su familia y bajo medidas preventivas.
Roca ingresó en prisión el 29 de marzo de 2006 y desde entonces no se le había concedido ningún permiso, a pesar de que había solicitado 18 y que en 2013 la Junta de tratamiento de la prisión propuso que se le concediera.
Roca ha sido condenado en sentencia firme por los casos Saqueo 1, Minutas, Belmonsa, Urquía, y Malaya y está pendiente de juicio por otros 120 procedimientos más.
El juez ha tenido en cuenta la «correcta» conducta del preso, que no ha motivado ninguna incidencia negativa, «más bien lo contrario», pues tiene «un excelente comportamiento y una actitud positiva, respetuosa y de plena consideración tanto respecto al resto de los internos como hacia los trabajadores del centro».
Roca «desempeñaba un papel relevante» en el entramado creado para cometer los delitos «y en ellos se causaron gravísimos perjuicios al Ayuntamientos de Marbella», pero «está colaborando para la liquidación de las responsabilidades civiles, aunque sea con el patrimonio que le fue embargado, sin que conste que hay ocultado bienes en el extranjero», destaca el auto.
«A ello se añade que el penado ha asumido su responsabilidad al menos aparentemente y tiene apoyo familiar y arraigo, buen comportamiento y ha disfrutado de salidas con custodia por motivos médicos sin haber originado incidente alguno», según los magistrados.
Los jueces también creen que «la naturaleza de los delitos permite confiar en que un permiso de tres días no supondrá riesgo de reiteración delictiva».
El Juzgado de Vigilancia Penitenciaria de la Audiencia Nacional le concedió este primer permiso a Roca con el visto bueno de la junta de tratamiento de la prisión de Alhaurín de la Torre (Málaga), en la que cumple condena.
La dirección de la prisión justificó su propuesta de permiso -a la que se opuso el fiscal- en la evolución «muy positiva» del interno y en la necesidad de dar este tipo de pasos como preparación de la vida en libertad.
El pasado mayo, el tribunal que condenó a Roca decidió la acumulación de las penas del reo para un cumplimiento máximo de veinte años, con lo que ya habría cumplido más de la mitad de la condena y, por tanto, satisface los requisitos para el disfrute de beneficios penitenciarios.
EFE