El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, el vicepresidente, Oriol Junqueras, y dirigentes del PDECat, ERC, Unidos Podemos, PNV, Compromís y Bildu han participado hoy en un acto de apoyo al diputado Francesc Homs y en contra de que se apruebe su suplicatorio por la consulta soberanista del 9N.
El pleno del Congreso prevé aprobar esta tarde la concesión del suplicatorio solicitado por el Tribunal Supremo con el voto favorable del PP, PSOE y Ciudadanos.
Los asistentes al acto han coincidido en reclamar que el Congreso no dé el plácet para juzgar a Homs «por defender una idea no violenta» y en el que el expresident Artur Mas ha hecho un llamamiento específico al PSOE para que no lo avale.
Puigdemont ha advertido de que aprobar el suplicatorio «llenará de más piedras la maleta del diálogo» y convertirá en «mera retórica» los supuestos gestos del Gobierno en la búsqueda de una solución.
«Hoy se va a escribir una página vergonzante del parlamentarismo español, que sus responsables querrán que no se recuerde, que no tendrán el coraje de defender. Hoy es el día en que la decisión de los votantes catalanes va a ser violentada, el día en que mi voto como ciudadanos va a ser invalidado por quien debería garantizarlo», ha proclamado.
Se ha quejado el presidente catalán de que «los partidos de la coalición gubernamental española», citando expresamente a PP, PSOE y Ciudadanos, vayan a pasar «por encima de la voluntad de los votantes».
Oriol Junqueras ha reafirmado el compromiso del Gobierno catalán «con la democracia, el voto de los ciudadanos, las urnas y el referéndum» soberanista y ha criticado que se vote el suplicatorio «mientras que Jorge Fernández Díaz preside una comisión parlamentaria».
En esa línea, ha considerado «difícil de entender en cualquier contexto europeo» que Santiago Vidal vaya a ser juzgado «mientras se le pone una alfombra roja a Daniel de Alfonso (exdirector de la Oficina Antifraude) e «inexplicable que se persiga a la presidenta electa de un parlamento por permitir un debate parlamentario».
Artur Mas ha considerado que permitir que Homs sea juzgado «es en el fondo un acto de flagrante injusticia (..) un sinsentido y una sinrazón». «Una vergüenza para España», ha clamado.
Según su criterio, no se quiere juzgar a Homs por desobediencia o prevaricación, sino por defender de forma pacífica la idea de la independencia y por poner unas urnas para que los catalanes pudieran manifestar su opinión.
«¿Es delito tener ideas pacíficas en la España del siglo XXI?», se ha preguntado Mas, quien ha emplazado al Congreso a votar en contra del suplicatorio «por decencia y dignidad».
Mas ha hecho un llamamiento específico a los socialistas, a quienes ha invitado a reflexionar sobre «si es digno hacer presidente a Mariano Rajoy y mandar al diputado Homs a juicio por poner las urnas».
Para el cantautor Lluís Llach, diputado independiente adscrito a Junts pel Sí, el «impacto simbólico» de que Homs tenga que enfrentarse a la justicia por ayudar a votar a 2,3 millones de ciudadanos catalanes da idea de la «baja calidad de las instituciones españolas», a las que se ha referido como «utensilios de represión».
Llach ha pedido a los españoles que «estén alertas», porque el llamado «problema catalán» es ahora -ha dicho- el «problema de la democracia española».
El portavoz de ERC en el Senado, Santiago Vidal -juez suspendido tres años por participar en la redacción de la Constitución catalana-, ha hecho hincapié en la «unidad» de los que hoy han participado en el acto: «Por mucho que nos amenacen, nos sancionen o inhabiliten lo único que conseguirán es que vayamos más juntos y unidos en el deseo de que el pueblo catalán pueda decidir en libertad su futuro».
También ha subrayado que en España se está intentando «criminalizar conductas perfectamente legítimas en otros estados de Europa» y ha reivindicado el «derecho a no callar» y a «exigir para Cataluña el derecho a decidir su futuro en el referéndum que con permiso o sin permiso vamos a realizar en el plazo máximo de un año».
El portavoz del PNV, Aitor Esteban, ha considerado que si hay un caso «de libro» de un suplicatorio que debe ser denegado es el de Homs, al que se quiere llevar a los tribunales por algo «estrictamente político».
Auxiliadora Honorato (Podemos) ha explicado que su partido está «radical y completamente en contra de la judicialización de lo político» y ha defendido la «oportunidad» que tiene el país de «construir sociedades plurales y diversas».
Por En Comú Podem, Marcelo Expósito ha señalado que le gustaría que esta tarde se estuviera debatiendo «la cuestión política de fondo», la reclamación «mayoritaria» por parte de la sociedad catalana de ejercer su derecho a decidir.
La portavoz de En Marea, Alexandra Fernández, ha reivindicado «el movimiento masivo y claramente alineado con la petición de referéndum», mientras que el diputado de Compromís Enric Bataller se ha mostrado preocupado por la «involución política y democrática» que, a su juicio, supone aprobar el suplicatorio.
Por su parte, la diputada Maite Beitialarrangoitia ha prometido a los independentistas catalanes el «apoyo rotundo» de EH Bildu en este asunto y ha acusado al Gobierno español de «añorar su época colonial» y actuar como la antigua metrópoli con sus colonias.
EFE