La senadora del grupo mixto y exalcaldesa de Valencia, Rita Barberá, ha muerto a primera hora de la mañana de este miércoles a los 68 años tras sufrir un infarto en el hotel Villa Real de Madrid.
Las reacciones por el fallecimiento de Barberá no han tardado en llegar. Mariano Rajoy se ha mostrado bastante afectado ante el fallecimiento de la senadora: “Me siento enormemente apenado. Se hace muy duro esto”, ha afirmado el presidente antes de abandonar el Congreso. Jesús Posada, diputado del PP, también ha mostrado su tristeza por este hecho, ya que como él ha dicho, “se conocían desde que eran niños”.
Una de las declaraciones más duras las ha dado el ministro de Justicia, Rafael Catalá, quien ha lamentado profundamente la muerte de la exalcaldesa y ha declarado que “cada uno tendrá sobre su conciencia lo que ha hecho y dicho de ella; las barbaridades que se le han atribuido sin ninguna prueba ni justificación”.
Fuera del Partido Popular, las primeras reacciones las ha dado Miquel Iceta quien ha trasladado sus condolencias a la familia de Barberá y al Partido Popular.
Esta misma mañana, en el Congreso de los Diputados, la presidenta del congreso, Ana Pastor, ha abierto la sesión parlamentaria pidiendo un minuto de silencio por el fallecimiento de la exalcaldesa de Valencia. Sin embargo, no todos han guardado el minuto de silencio ya que los diputados de Unidos Podemos y de ERC se han puesto en pie y han abandonado la sala en ese momento.
Pablo Iglesias ha explicado en su cuenta de Twitter que “lamentamos la muerte de Barberá pero no podemos participar en un homenaje político a alguien cuya trayectoria está marcada por la corrupción”. Íñigo Errejón y Alberto Garzón también han expresado su opinión al respecto en las redes sociales a favor la decisión de Pablo Iglesias quien ha alegado que “no estaría mal que alguna vez guardáramos minutos de silencio en el Congreso por las víctimas de la pobreza energética”.
Hacer un minuto de silencio en el Congreso por la muerte de Rita Barberá es un homenaje a su trayectoria. Nos negamos y nos salimos.
— Alberto Garzón (@agarzon) 23 de noviembre de 2016
Contrario a esta postura se ha mostrado el diputado de Compromís, Joan Baldoví, quien ha asegurado que sí se han quedado al minuto de silencio porque «por encima de cualquier diferencia política, era una muestra de respeto personal”. En este sentido, Juan Carlos Girauta ha añadido que hacer un minuto de silencio en una institución por el fallecimiento de una senadora “no es homenajear la trayectoria política de nadie, sino respetar a una persona” a la vez que el vicesecretario del PP, Martínez Maíllo, ha calificado de “miserable” la actuación de Iglesias y sus compañeros.
Tanto García-Escudero como el portavoz del PP en la Cámara Alta, José Manuel Barreiro, han expresado su consternación por el fallecimiento de Rita Barberá, a la que han definido como «una gran persona» y «compañera». «Es un día trágico, un momento muy doloroso», ha resumido Barreiro, que ha aludido a «muchas razones» por las que hoy su partido se encuentra desolado y que no ha considerado necesario mencionar. «Están en la mente de todos», ha dicho.
Por su parte, la presidenta del PP en Valencia, Isabel Bonig, que en su momento pidió la entrega del acta de senadora de Barberá, ha asegurado que está “triste” porque “se ha marchado un referente político y la mejor alcaldesa de Valencia”. Por último, el Ayuntamiento de Valencia ha decretado tres días de luto en la ciudad y las banderas ya ondean a media asta.
La ministra de Defensa y secretaria general del Partido Popular, María Dolores de Cospedal, ha acudido poco antes de las diez de la mañana al hotel donde ha fallecido Rita Barberá. Cospedal ha lamentado la muerte de la exalcaldesa de la que ha dicho que fue una “magnífica política” y “una mujer honrada e intelectual”.
Andrea Morea