Los dos miembros de la compañía Títeres de Abajo (integrada por Alfonso Lázaro y Raúl García), cuya causa judicial se archivó el pasado 11 de enero, fueron acusados de enaltecimiento del terrorismo por esta representación sarcástica, incluida en la programación del Ayuntamiento de Madrid de las fiestas de Carnaval del año pasado. «Es de necios confundir la realidad con la ficción», han advertido al inicio de la actuación al público, unas cincuenta personas que superaban la mayoría de edad, con la excepción de algún niño acompañado por sus padres, y a los seguidores vía online. También han recordado que la obra «La Bruja y Don Cristobal» se ha tratado de una representación «mediática» pero que «poca gente ha tenido la oportunidad de ver».
En un comunicado, los creadores de la obra han afirmado que para este reestreno han introducido «algunos cambios» pero han recalcado que han mantenido lo «esencial» de la obra: «La denuncia de que vivimos gobernados por un miedo inducido por quienes tiene el poder». En la obra aparecen referencias los políticos, los religiosos, la justicia y los medios de comunicación, en la que aparecen acciones como el ahorcamiento de un guiñol vestido de juez, el apuñalamiento de un policía o la violación de una monja.
Brujería, feminismo, okupación o terrorismo son las condenas a las que se enfrenta la protagonista «La bruja y don Cristobal», mientras huye de los «amos del capital». Cuando ha salido el cartel «Gora Alka-ETA», -que se convirtió en el símbolo de la obra-, ha sido el más aplaudido de la actuación, que ha durado alrededor de 45 minutos. Un momento cálido que se puede traducir como un apoyo a los actores y la represión al humor que ha vivido durante el proceso judicial.
No sólo el público presente ha transmitido su apoyo a los titiriteros, también los políticos han mostrado su solidaridad con los titiriteros, en un manifiesto publicado hoy en el diario Público, un grupo de políticos, miembros de asociaciones de vecinos, sindicatos y de la plataforma ciudadana Ganemos Madrid han expresado su compromiso «con defensa de la libertad de expresión y con la cultura».
Entre los firmantes hay cuatro concejales de Ahora Madrid, grupo que dirige el gobierno municipal, y un diputado de Podemos en la Asamblea regional, Raúl Camargo. El edil del Ayuntamiento por Ahora Madrid, Carlos Sánchez Martos, ha estado presente durante la representación junto a otras caras conocidas como el humorista Facu Díaz o el periodista Javier Gallego.
Por parte de la portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Madrid, Begoña Villacís, ha dicho que, aunque no irá a ver la obra de los titiriteros, no hay nada que «reprochar» porque el público ya no es infantil, la obra no está subvencionada con fondos municipales y se representa en un espacio privado. Una vez finalizada la obra, tras poner a todo el público en pie y una larga salva de palmas, se ha celebrado una mesa redonda dentro del propio Tetaro del Barrio en el que han participado el cantante César Strawberry, el grupo de rap La Insurgencia, la tuitera Cassandra y la madre de Alfonso Fernández 'Alfon', Elena Ortega, entre otros.
Redacción