Varios agentes de la Policía Nacional entraron en un chalet situado a las fueras de la localidad de Güímar y arrestaron a un total de 20 personas por organizar peleas ilegales de perros este sábado, 18 de febrero. Los agentes desplegaron exprofeso desde la Península porque ya habían recibido el 'chivatazo' de lo que ocurría cada fin de semana en ese domicilio. A su entrada se encontraron un cuadrilatero que se utilizaba a modo de ring, una gran barbacoa para asar la comida para el terrible 'festejo' y varias jaulas con perros en su interior. Entre los arrestados se encuentra un policía local de Adeje (Tenerife), según apunta el 'Diario de Avisos'.
Hasta el chalé también se desplazó una unidad de veterinarios que se encargaron de atender a la docena de perros, en su gran mayoría pit bulls y bardinos, que allí se encontraban de los cuales tres presentaban heridas de consideración. El resto de ejemplares fueron trasladados el domingo, 19 de febrero, a un albergue de animales en el sur de la Isla. Desgraciadamente, uno de los bardinos no resistió una de las brutales peleas y fue encontrado sin vida y completamente ensangrentado en una bolsa de basura.
Los 20 detenidos son de procedencia grancanaria, tinerfeña y penínsular, aunque lo que más destaca es la presencia de un policía local de Adeje, afincado en Güímar, entre ellos. El agente tenía a su cargo una finca en el Valle San Lorenzo (Arona), donde tenía una gran jauría de perros, que también fue registrada el domingo, al día siguiente de la primera intervención. El 19 de febrero, también se produjo otro registro en El Ortigal (La Laguna), en casa de un conocido cuidador de perros. Estas intervenciones se enmarcan dentro de una operación de la Policía Nacional que pretende desmantelar una red de apuestas ilegales con peleas de perros ilegales.
El propietario de la finca registrada, Amador Díaz, afirma que suele alquilar el chalet todos los fines de semana y casi siempre a gente adulta porque no quieren tener problemas con adolescentes. En esta ocasión, relata que se lo arrendó a una persona de unos cuarenta años de edad y que decía querer el espacio para realizar una fiestas con algunos amigos de Las Palmas de Gran Canaria.
El alquiler era el sábado y domingo, pero “normalmente les dejo entrar los viernes por la tarde-noche para que dejen la casa el domingo por la tarde”, relata el propietario de un chalet apartado a donde se llega por una sinuosa pista asfaltada por la que solo cabe un coche y a donde los participantes llegaban siguiendo una pegatina (M/A) puesta desde Güímar en los contenedores de basura para no perderse tan indigno espectáculo, según cuenta 'Diario de Avisos'.
En la actualidad, días después de la intervención policial, el piso sigue tal y como lo dejaron los agentes de la Policía Nacional. De hecho, se puede observar una especie de antepalco en uno de los laterales del 'ring' improvisado en el que se puede divisar algunas chocolatinas, pipas, galletas o cervezas. En cuanto a las habitaciones interiores todavía se encuentran algunas pertenencias de los detenidos, las jaulas de algunos de sus perros e incluso un DNI.
Carlos Lospitao