La Fiscalía Genera de Estado propuso la semana pasada el relevo de 35 cargos en la Fiscalía, la mayoría vacantes por final de mandato. De hecho, en la Fiscalía había un considerable atasco de nombramientos y puestos vacantes, debido al año que el Gobierno ha estado en funciones también los estaba el Fiscal General del Estado. Fuentes cercanas a la Fiscalía explican a Estrella Digital que estos nombramientos, sometidos a votación en el Consejo Fiscal, fueron objeto de reuniones de alto nivel entre veteranos fiscales, algunos exFiscales Generales del Estado, así como relevantes personalidades que han tenido cargos en la judicatura con gobiernos del PP y del PSOE.
Estás reuniones se han celebrado en varios lugares de Madrid, entre otros en los salones reservados de un hotel de cinco estrellas de la capital. Finalmente todas las decisiones se vieron sometidas a votación por el Consejo Fiscal, un órgano consultivo cuyos miembros son elegidos por los fiscales de la carrera.
No es habitual que la Fiscalía se vea en la tesitura de renovar tal cantidad de puestos en la carrera. En esta renovación había en juego importantes puestos, como la Fiscalía Anticorrupción o la Fiscalía especial para delitos medioambientales y urbanísticos. Estos cargos discrecionales tienen una vigencia de cinco años, de manera que pasada esta fecha vuelven a salir a concurso. Es decir, buena parte de los fiscales relevados en estos cargos procedían del fiscal General del Estado nombrado por Zapatero, Cándido Conde-Pumpido.
A pesar del revuelo político por la coincidencia con declaraciones del ministro Rafael Catalá sobre la Fiscalía de Murcia, de hecho los progresistas de la Unión Progresista de Fiscales retienen una fiscalía clave, pese a que no fue respaldada por el Consejo Fiscal. Se trata de la Fiscalía para delitos contra el Medio Ambiente y el Urbanismo, que seguirá en manos del veterano Antonio Vercher, que ha sido el pionero en esta fiscalía más discreta que otras, pero clave para delitos relacionados con la corrupción.
Fuentes de la Fiscalía aseguran que el otro caso en el que el fiscal General del Estado, José Manuel Maza, no ha hecho caso al Consejo Fiscal es en el relevo de la Fiscalía del TSJ del País Vasco. La elegida ha sido la fiscal de la Audiencia Provincial de Vizcaya, Carmen Adán del Río, en lugar del más veterano Juan Ramón Calparsoro.
En realidad, a pesar del volumen de renovaciones, las conversaciones se han centrado en pocos puestos, de enorme relevancia. Los progresistas lograron, por ejemplo, que la sustitución del Fiscal Jefe de Murcia, Pedro Bernal, se hiciera por el mismo fiscal que estaba llevando el caso más político de la región, el llamado Auditorio, en el que se ha declarado investigado al presidente regional, Pedro Antonio Sánchez. De hecho, la Unión de Fiscales Progresistas, que cuenta con solo 200 asociados, logra tener la mitad de los puestos relevantes, repartidos co la Asociación de Fiscales, de corte más conservador.
F. de Castro