El juez de la Audiencia Nacional, José de la Mata, rastrea el origen de dos millones de euros que en mayo de 2013 Oleguer Pujol, el benjamín del expresidente catalán, sacó de España a Holanda con una operación de venta de participaciones que pasaron, sin justificación económica, de valer 1 euro a costar 1.345 euros.
El juez que investiga a la familia Pujol sospecha que Holanda es uno de los países que usó Oleguer Pujol para ocultar dinero a la Hacienda española y ahora, en un auto, pide de nuevo información sobre el hijo pequeño de Jordi Pujol a ese y otros cuatro territorios: Delaware (Estados Unidos), Guernsey (Reino Unido), Curazao (una isla autónoma caribeña de los Países Bajos) y Portugal.
Una de las operaciones sospechosas que investiga De la Mata relacionada con Holanda fue la compraventa de participaciones de una sociedad, New Positively, creada en 2011 en Valencia. Según explica el juez en el auto, Oleguer Pujol y su exsocio Luis Iglesias adquirieron en octubre de 2011 1.500 participaciones de New Positively a través de la sociedad holandesa que compartían BMD Toussaintkade 48 Den Haag BV y a razón de 1 euro cada una, con lo que se hicieron con el 50% de la sociedad por 1.500 euros.
En 2012, New Positively compró tres locales en Mallorca alquilados a su vez a Mercadona y lo hizo usando préstamos bancarios. Un día antes de esa compra, Oleguer Pujol y su socio, usando BMD, vendieron 749 participaciones a la empresa a la que se las habían comprado en 2011 y por el mismo precio (1 euro cada una). Dos meses después de la operación, Oleguer Pujol y su socio compraron otra vez a la misma empresa 130 participaciones por 130 euros.
Finalmente, el 10 de mayo de 2013 hicieron una serie de operaciones que el juez considera sospechosas: compraron 620 acciones por 620 euros (con lo que volvieron a tener 1.500 acciones, el 50 %), e inmediatamente las vendieron a razón de 1.345 euros cada una, con lo que su sociedad holandesa obtuvo 2.028.327 euros. «El resultado es que más de 2.000.000 euros salen de España hacia los Países Bajos sin que se haya encontrado una razón económica que justifique el incremento de valor que se produce en las participaciones», concluye el juez.
Precisamente en una isla autónoma de los Países Bajos, Curazao, Oleguer Pujol llegó a tener 2,6 millones de euros en una cuenta que afloró a la Hacienda española en 2012, el mismo año en que se registró otra operación sospechosa del hijo de Jordi Pujol, esta vez relacionada con Guernsey (Reino Unido).
Se trata de la venta por parte de RBS Specialised Property Investments Limited (empresa del grupo Royal Bank of Scotland) del 11% de la sociedad de Guernsey Drago Real Estate Partners Limited a la empresa de Oleguer Pujol y Luis Iglesias Aegle International Limited, constituida en Tórtola (Islas Vírgenes Británicas). Esta compra, que se hizo en junio de 2012, le costó al hijo pequeño de Jordi Pujol y su socio 1,7 millones de euros, cuando, según el magistrado, esa participación del 11% estaba valorada en 32,3 millones de euros en base a los inmuebles que Drago tenía en España y Portugal. El juez se pregunta por qué, «pese a su indudable valor», esa cuota de la empresa se vendió «por un precio muy inferior» al benjamín de los Pujol.
En el auto, De la Mata analiza otras operaciones y finalmente pide información tanto a esos países como al Registro Civil, al que le reclama el régimen económico que tiene Oleguer Pujol con su esposa, Sonia Soms, y también al propio imputado, a quien solicita explicaciones sobre 194.490 euros que recibió de una empresa en forma de préstamo. A las autoridades de Guernsey, Curazao, Reino Unido y Portugal les pide los movimientos de posibles cuentas del investigado y de sus empresas en esos territorios.
EFE