El cese definitivo de ETA y la entrega de armas por parte de esta a lo largo de este sábado 8 de abril no ha dejado indiferente al panorama político español. La organización terrorista ha comunicado a primera hora de la mañana a las autoridades francesas la ubicación de ocho zulos con 120 armas de fuego y tres toneladas de explosivos. Por su parte, el Gobierno español no ha querido formar parte de esta negociación que junto con una gran parte de los partidos políticos del país han considerado como un acto de «propaganda».
La primera persona en referirse al tema ha sido el secretario de Ciudadanos en el Congreso, Miguel Gutiérrez, quien ha tachado de «escenificación ridícula» la entrega de armas de ETA, y ha añadido que se trata de un «nuevo engaño de una banda terrorista que intenta blanquearse».
Así se ha manifestado Gutiérrez en declaraciones a los periodistas en la sede del partido, después de que los denominados «mediadores» en el desarme de ETA anunciasen la entrega de las coordenadas de ocho depósitos de armas de la banda. «Nosotros lo único que decimos es que es un nuevo engaño de una banda terrorista que intenta blanquearse», ha manifestado el secretario de Ciudadanos. También ha lamentado que «haya personas engañadas» por ETA, una banda que «habla de un proceso de paz como si fuera posible». Su líder del partido, Albert Rivera, ha continuado la línea de su compñaero pero además se ha centrado en defender a los guardias civiles, los policías, los fiscales y los jueces los que «verdaderamente han acorralado» a la banda terrorista.
Por su parte, el Gobierno de Navarra ha calificado el desarme como «un mandato incontestable largamente demandado por la ciudadanía». El Ejecutivo regional indica en un comunicado que «la preocupación y el trabajo de este Gobierno se ha centrado estas semanas en favorecer que el desarme fuera llevado a cabo con rigor, de forma legal, total, definitiva y verificable, de modo que el anhelo que la propia sociedad ha manifestado durante todos estos años no quedara frustrado». Han calificado como «pasos necesarios para la consolidación de un nuevo tiempo abierto al futuro».
Primeras palabras del PSOE
Unas horas más tarde, el exlehendakari y aspirante a la Secretaría General del PSOE, Patxi López, ha asegurado que la confirmación del desarme de ETA supone «la foto de la victoria de la democracia y la derrota del terrorismo». Así pues, no descarta que se trate de un «nuevo paso hacia su desaparición definitiva». En declaraciones a los medios antes de iniciar un acto con militantes socialistas en la localidad valenciana de Benifaió, López ha asegurado que es un día para que los demócratas estén «satisfechos» por la «desaparición de este fantasma que planeaba sobre nuestras vidas».
Sin embargo, este no ha sido el único socialista en pronunciarse. Su adversaria para liderar el PSOE, Susana Díaz, ha añadido que el Estado de derecho y la democracia venció a ETA hace cinco años, por lo que el desarme de la banda terrorista «llega con cinco años de retraso». «Lo primero es acordarnos de las víctimas y sus familias», añadía la presidenta de Andalucía.
Vox, el partido fundado por José Antonio Ortega Lara, secuestrado por ETA durante 532 días, ha descalificado «la farsa» del desarme acometido por la banda y ha recalcado que «ha sido y seguirá siendo terrorista». En un comunicado, declaraban que «la supuesta entrega de armas no es más que la ratificación de que los terroristas han conseguido su propósito, marcar la agenda política desde las instituciones con la complicidad del Gobierno de España». Aun así, tampoco han querido olvidar que ETA es la «causante de centenares de asesinatos -más de 300 aún sin juzgar- y del sometimiento de los vascos a su discurso totalitario bajo todo tipo de intimidaciones y amenazas».
El Gobierno nacional también se pronuncia
El vicesecretario de Sectorial del Partido Popular, Javier Maroto, ha afirmado que se trata de «un hecho positivo» pero «un paso insuficiente» y ha asegurado que «no puede servir para reescribir la historia» ni para que haya un «reposicionamiento de los partidos políticos». «Pretenden reescribir la historia diciendo que existía como una guerra, con dos bandos, y que el bando que asesinaba decide ser el bando bueno entregando las armas y buscando la paz. Esa manera de reescribir la historia es profundamente injusta, desajustada a la realidad e hiere la dignidad de las víctimas», ha sostenido el dirigente popular.
El Ejecutivo, en un comunicado, ha rehusado hacer ninguna valoración sobre el armamento entregado este sábado por ETA y sobre su integridad hasta que este haya sido analizado por las autoridades y la justicia francesa, de acuerdo con la legalidad vigente. De hecho, ha reiterado que los terroristas no pueden esperar ningún trato de favor del y «mucho menos impunidad a sus delitos».
En su opinión, lo ocurrido hoy no es más que la consecuencia de la derrota «definitiva» de ETA por la democracia española, «con las armas de la ley, la unidad política y la cooperación internacional, así como por la eficacia y entrega de los Cuerpos y Fuerzas de la Seguridad del Estado». Por ello, ha recalcado que «los terroristas no pueden esperar ningún trato de favor del Gobierno y mucho menos impunidad a sus delitos».
Andrea Morea