La presidenta andaluza, Susana Díaz, y el exlehendakari Patxi López han formalizado hoy sus precandidaturas a la Secretaría General del PSOE defendiendo proyectos integradores, pegados a las esencias socialistas y que sirvan para transformar la sociedad y ganar elecciones.
Han sido los primeros en registrar su precandidatura en la sede de Ferraz –mañana lo hará Pedro Sánchez– a cuatro días de que empiece la recogida de avales, que será el próximo jueves y se extenderá hasta el 4 de mayo.
El diputado Eduardo Madina y la secretaria de Organización de Aragón, Pilar Alegría, han sido quienes han formalizado la precandidatura de Díaz en su nombre, y lo han hecho asegurando que su propuesta «no compite contra nadie ni va contra nadie» pero en ella se puede reconocer «al cien por cien» al Partido Socialista. Es lo que ha dicho Madina al defender el proyecto «integrador, sólido y coherente» que representa la presidenta andaluza para liderar el partido los próximos años.
«Con una siglas centenarias», ha recalcado el diputado, el PSOE que quiere la candidatura de Díaz busca precisamente el «reencuentro» con esas siglas y con el «significado ideológico socialista, que tiene una vocación de mayorías para transformar el país.
Ante la recogida de avales, que comenzará el jueves, Madina espera que el proceso sea «libre, abierto, transparente» y con información «plena». Pilar Alegría ha añadido que este proceso es muy importante porque cuando un militante te avala «está respondiendo por ti».
Según el diputado vasco, la candidatura de Díaz representa «un gran espacio de confluencia» de distintas generaciones y sensibilidades y con itinerarios políticos dispares que se dan la mano para poner en marcha un partido que necesita de «su mejor versión» para afrontar los retos que tiene por delante.
Pero lo que no busca -ha recalcado Madina- es hacer del próximo congreso «una batalla», reprochando a Pedro Sánchez que pretenda hacer de esta carrera por la Secretaría General una disputa entre su candidatura y la de Susana Díaz, dejando ya fuera de juego a Patxi López.
«Patxi para mí es un gran compañero que merece el máximo respeto por el ejemplo vital que ha dado», ha subrayado Madina, a quien le sobra -ha dicho- «el lenguaje bélico» de otros.
«Enfrentamiento o unidad»
Ante la idea de Sánchez de apartarle de la confrontación por el liderazgo socialista, Patxi López se ha limitado a responder que solo ve dos opciones para el PSOE: «el enfrentamiento o buscar la unidad».
Su primer gran objetivo, ha explicado después de Madina también en una rueda de prensa en Ferraz, es la unidad porque «sin unidad da igual a quién pongamos», insistiendo en que mientras «se griten» unos a otros «nadie les va a escuchar».
Patxi López ha recalcado además que su prioridad es ganar a la derecha y ha dejado claro que no entra en sus planes pactar con una «izquierda irreal», en alusión a Podemos, que luego acaba llegando a acuerdos con el PP, recordando el voto de la formación morada en la investidura fallida de Pedro Sánchez.
López, que se ha comprometido, si gana, a integrar a sus adversarios, una reciprocidad que les ha pedido también a ellos, ha señalado que hay miles de socialistas que quieren superar «estos meses de dolor y confrontación» y que el PSOE ocupe el lugar que le corresponde, liderando una mayoría progresista que gane al PP.
Quiere construir un socialismo «exigente», «autónomo» y sin complejos ante la derecha, y por eso desde que decidió dar este paso se ha volcado en escuchar lo que la militancia tiene que decir, haciendo una campaña «humilde», agrupación por agrupación y sin grandes actos en los que los afiliados «sólo pueden aplaudir».
En esta campaña, que desembocará en las primarias del 21 de mayo, López ha asegurado que no va a jugar a la «descalificación» porque quien lo hace está generando división, que es exactamente lo contrario que debe hacer el PSOE para superar la situación de ruptura en la que está desde el año pasado.
EFE