Eran las 8:45 horas de la mañana cuando los agentes de la UDEF se han presentado en el domicilio que Jordi Pujol Soley posee en la calle General Mitre. Si en 2015 la inspección se redujo a la habitación del primogénito, en esta ocasión el registro ha abarcado toda la vivienda y ha durado en torno a siete horas, tras las cuales han salido con varias cajas. No ha sido el único que han realizado, pues han visitado otros lugares frecuentes del clan Pujol como la casa que tiene el ex presidente de Cataluña en Queralbs y su despacho en la calle Ganuxer. En total, hasta cinco domicilios distintos con el fin de hallar documentación de Marta Ferrusola y la sociedad Kopeland Foundation, una sociedad que fue ideada en Panamá para evadir impuestos.
Estos hechos se han producido sólo un día después de que Jordi Pujol hijo ingresara en prisión por evadir al menos treinta millones de euros al extranjero mientras era objeto de búsqueda por la policía. Él, que se encontraba en la prisión de Soto del Real, ha sido trasladado a Barcelona para colaborar y presenciar los hechos. Tras los registros, la Policía Nacional ha trasladado a los calabozos de la comisaría de La Verneda de Barcelona a Jordi Pujol Ferrusola, antes de enviarlo de nuevo a Madrid.
El expresidente de la Generalitat Jordi Pujol, ha mostrado hoy su disgusto por el registro de su vivienda y su despacho en Barcelona por parte de la Policía Nacional, que buscaba documentación sobre la fortuna familiar, y ha afirmado que siente «mucho todo lo que está pasando». Ha sido la única frase que ha expresado, pese a la multitud de medios que se han congregado frente a él.