Las autoescuelas catalanas relaman al gobierno que preste los servicios a los que está obligado. Los examinadores reclaman al Ministerio de Interior el cumplimiento de sus acuerdos. El sector se ve abocado a una crisis a causa de los recortes en las prestaciones de servicios de examen. Este lunes se movilizan en Madrid.
Las autoescuelas tiemblan con la huelga de examinadores de tráfico. Los paros convocados en toda España ya han provocado numerosas dificultades a los centros de formación. El Vicepresidente de la Asociación de Autoescuelas de Vilafranca, la más animosa e impulsora de las acciones reivindicativas en Cataluña, advierte sobre consecuencias catastróficas si los paros continúan.
Las huelgas de los examinadores de tráfico, tanto en Cataluña como en el resto de España, han puesto en jaque a las autoescuelas de la Comunidad catalana que temen por las consecuencias económicas «dramáticas» que pueden sufrir, sobre todo en estos meses de verano que es cuando registran más demanda de alumnos, sobre todo jóvenes que aprovechan las vacaciones estivales para obtener el carné de conducir.
Las asociaciones catalanas que ya han realizado dos huelgas este mismo mes de Julio, los días 5 y 8 de Julio, acuden hoy 24 de Julio a manifestarse a Madrid, a partir las 12 y media de la mañana, desde Atocha al Congreso de los DIputados, Apoyados por entidades de toda España, los centros de formación exigen tanto el cumplimiento del servicio por parte del Ministerio como que este cumpla los acuerdos salariales con los examinadores y se resuelva el conflicto de forma estable. Se da la circunstancia, además, de que en Cataluña, la Administración no abona los 250 euros de suplemento que concede a estos profesionales en otras Comunidades por lo que se añade a las deficiencias del servicio una dificultad añadida.
El Vicepresidente de la Asociación de Autoescuelas de Vilafranca no descarta que tras esta situación se encuentre una voluntad de privatizar el servicio. Recuerda, por otra parte, “que en una materia tan relevante para la seguridad vial, sería necesario reglar la enseñanza, por parte del Ministerio, y dar un valor académico al título de profesor de autoescuela”.
En todo caso, este lunes 24, las autoescuelas catalanas ocuparan Madrid con una única pretensión: que se resuelvan los problemas del servicio de examinadores que están provocando el colapso económico de los centros de formación.
Está en el aire la contratación propia de los meses de verano, por la mayor afluencia de alumnos, e incluso algunas autoescuelas, que ya arrastran muchos problemas económicos, pueden verse abocadas al cierre, ya que existe una relación directa entre exámenes (número de sesiones de formación e ingresos) y resultados económicos. El mes de julio ha sido siempre de actividad frenética para las autoescuelas, ya que en agosto es un mes inhábil para los exámenes del carné de conducir. Las autoescuelas, por tanto, trabajan contrarreloj durante el mes de julio.
Los compromisos con los examinadores proceden del año 2008. Los examinadores ya estuvieron en huelga en 2015, protesta que terminó con un acuerdo con la Dirección General de Tráfico que -según denuncian- no se ha plasmado ni en relación con los complementos retributivos ni en la mejora de las condiciones de seguridad a la hora de entregar los resultados
Miguel de la Balsa