El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Melilla, en funciones de guardia, ha decretado el ingreso en prisión acusado de desórdenes, desobediencia y amenazas, después de tomarle declaración y practicar diligencias forenses para evaluar su imputabilidad.
El detenido había pasado esta mañana a disposición judicial tras ser trasladado por agentes de la Policía Nacional a los juzgados de Melilla, después de pasar la noche en los calabozos de la Jefatura Superior de Policía en la ciudad.
El hombre, armado con un cuchillo apuntando a su cuerpo, irrumpió a primera hora de la mañana en el puesto fronterizo de Beni-Enzar y fue reducido por ocho policías, uno de los cuales resultó herido de forma leve en una mano.
Los agentes le redujeron después de que uno de ellos cogió una barrera de plástico de gran tamaño, de las que se utilizan para controlar el paso de vehículos, y por la espalda se la tiró a la cabeza de este hombre, lo que provocó su caída.
El detenido no es español ni reside en Melilla, según la Delegación del Gobierno en la ciudad, que ha apuntado que podría ser un marroquí de 29 años.