Pedro Sánchez ha reunido a su Comisión Ejecutiva Federal al completo para cerrar su breve curso político al frente del PSOE pero, sobre todo, para tener a todo su equipo listo de cara a septiembre. Son muchos los frentes que se abren en el panorama político a la vuelta de verano y el secretario general quiere tener a toda su gente preparada.
El asunto central, sin duda, será la posición del PSOE con Cataluña. Para muchos socialistas, el posicionamiento de Ferraz marcará la diferencia en la resolución del conflicto abierto entre Gobierno y Generalitat. Sin embargo, nadie -tampoco en el PSOE- descarta un posible adelantamiento electoral en Cataluña ante el encallamiento de las posiciones, con lo que el escenario de unas elecciones anticipadas también empieza a tomar una forma más que consistente.
Mientras, Sánchez continuará con la estrategia definida a mediados de mes con el PSC, la llamada Declaración de Barcelona, aprobada por las ejecutivas de ambos partidos. Con ella, las dos formaciones se proponían que “el choque de trenes del próximo 1 de octubre no se produzca” y vuelve a insistir en una “Reforma Federal de la Constitución”, en la que se reconozca “plenamente su carácter plurinacional”. Además, se defiende proponer una “oferta política” y la implementación de “iniciativas parlamentarias para desbloquear los más de cinco años de discriminación del Ejecutivo central a Cataluña”.
Este último punto es el que pondrá en marcha Sánchez a partir de septiembre, según ha anunciado su ‘número dos’, Adriana Lastra. El partido presentará una serie de iniciativas parlamentarias para conseguir “una triangulación” con diferentes fuerzas políticas para conseguir avanzar “frente al inmovilismo de Rajoy y el independentismo de Puigdemont”, ha dicho la vicesecretaria general del partido.
Sin embargo, las previsiones apuntan a que el encallamiento puede llegar con la medida más espinosa, la referente al sistema de financiación autonómico. Es uno de los asuntos centrales de la Declaración de Barcelona, que lo identifica como “el origen de buena parte de los problemas que existen en estos momentos”.
Lastra ha insistido en que desde el PSOE hacen “oposición de Estado” para tratar de explicar el apoyo al gobierno de Mariano Rajoy frente a las posiciones independentistas -mientras piden que su dimisión por su gestión de esta crisis-. “Vamos a respaldar al Gobierno frente al independentismo catalán”, ha insistido Lastra y, acto seguido, hacía una dura crítica a las políticas de Rajoy “de los últimos cinco años”. “Rajoy ha sido una máquina de hacer independentistas”, ha sentenciado. De hecho, este es uno de los motivos por los que Ferraz pide la dimisión del presidente del Gobierno. “Ha sido incapaz de aportar soluciones”, insistía Lastra.
Su propio problema territorial
Otro de los aspectos que Sánchez quiere gestionar con impulso a partir de septiembre son “los territorios”. La celebración de los congresos más polémicos durante este fin de semana ha dejado una cierta resaca, especialmente el de Andalucía. La posición conciliadora del secretario general con la federación andaluza, cuyo congreso acudió a clausurar este domingo, se vio respondida por Susana Díaz con una promesa de lealtad y una advertencia. La presidenta de la Junta le pidió que no le hiciera elegir “dos lealtades”, en referencia a la dirección de Andalucía y al partido.
“Nunca se ha dado esa dicotomía. El PSOE siempre ha defendido lo que es mejor para el conjunto de la sociedad”, ha intentado zanjar Lastra, que ha asegurado que no hay ningún debate abierto en torno al modelo territorial que se aprobó en el 39 Congreso Federal. “No he visto que ningún compañero haya cuestionado las resoluciones aprobadas” y, en cualquier caso, el debate “está cerrado hasta el próximo congreso”.
Desde Ferraz se insiste precisamente en la idea central del discurso de Sánchez en tierra hostil: la búsqueda de unidad en el partido. «Todos los socialistas hablamos el mismo lenguaje: el de la igualdad, la solidaridad, la libertad y la lealtad», decía Sánchez este domingo. Por eso, su plan a partir de septiembre será reunirse con todos y cada uno de los presidentes autonómicos socialistas, así como con los alcaldes de las ciudades más importantes. Aunque el objetivo oficial será el objetivo de preparar los programas electorales, “también el de las generales”, aseguran.
La otra pata de la ofensiva de Sánchez se centrará en un modelo fiscal, en el que el equipo económico ya está trabajando. “Vamos a empezar a trabajar ya en un nuevo modelo fiscal para nuestro país, porque con este PP siempre pagan los mismos y nosotros lo que queremos es que pague más el que más pueda o el que más tenga”, ha explicado Lastra.
Dimisión de Rajoy
El equipo de Sánchez ha vuelto a insistir en pedir la dimisión del presidente del Gobierno, una máxima que posiblemente repetirán a la vuelta de vacaciones dado el “coste reputacional” que ha tenido “la imagen de Rajoy en el banquillo declarando por los casos de corrupción en su partido”. “Rajoy tiene un problema con la corrupción y España tiene un problema con Rajoy”, ha sentenciado Adriana Lastra.
Además de la declaración del presidente ante la Audiencia Nacional, en Ferraz consideran que el presidente del Gobierno debería dimitir por la gestión de la “grave crisis territorial” así como por la situación de España a la cabeza de los “ránkings europeos de precariedad y pobreza”.
Paula Pérez Cava